LA maravillosa II REPÚBLICA
Como nacía un nuevo sistema el 14 de abril, había que destruir todo aquello que recordase la monarquía. Por ejemplo, se cambiaron los nombres de las calles como Alfonso XIII o Reina Victoria, por nombres de los líderes de los sucesos de Jaca (Galán y García Hernández), o eran sustituidos por nombres como Pablo Iglesias, República, 14 de abril, etc., que empezaron a conocerse en toda España. Se llegó al extremo de derribarse estatuas de Isabel II y de Felipe III.
En Tetuán, el día 14, la Guardia Mora rechaza un intento de toma de la Alta Comisaría, con el resultado de cinco muertos y veinticinco heridos. En España hay una epidemia de agresiones, ya que se aprovecha la ocasión para satisfacer alguna venganza. Se empieza a planificar la persecución de todo aquello que se relacione con monarquía, religión, españolismo. Son atacados, saqueados y quemados locales monárquicos. Por ejemplo, las sedes de los Centros Circulo Nacionalista, o las oficinas del Sindicato Libre en diferentes provincias, son asaltados, cuando no clausurados. En Málaga, el día 15, el periódico "La Unión Mercantil" fue asaltado y destrozado, así como el diario católico "Defensor de Canarias" en las Palmas.
El movimiento "proletario" sale a la calle a hacer justicia en sus manos. Se dio el caso en Barcelona el día 15, de que un gerente de fábrica conocido por su lucha frente a las huelgas, es asesinado por miembros del revolucionario Sindicato Único. En esa ciudad dicho Sindicato desata una ola de atentados y asesinatos contra miembros del monárquico Sindicato Libre.
Alcalá Zamora es designado presidente del Gobierno provisional de la República, asumiendo también por obra y gracia de la revolución, y no de un proceso electoral, la Jefatura del Estado. Es de resaltar que los nuevos ministros (todos del comité revolucionario) son los que nombran al presidente, y éste es quien los designa como ministros. Se puede hablar en este tipo de procedimientos de legalidad de un nuevo régimen ?.
Pareciera que el nuevo régimen no encontraría serios obstáculos en su camino. Se publica un decreto de concesión de amnistía total para todos los delitos políticos, sociales y de imprenta. Anticipándose al decreto, en Bilbao unas turbas atacaron la cárcel de Larrinaga y la de mujeres, a los gritos de "¡Viva el Comunismo" y "¡Viva los Soviets!", siendo liberados los presos, quienes en compañía de sus liberadores, tras destruir por completo sus recintos penitenciarios, sobre todo los archivos, deciden seguir su tarea asaltando y destruyendo tiendas. Algo parecido ocurrió en las cárceles de Madrid, Sevilla, Valencia y Barcelona.
En la capital catalana, el aspecto de las calles era el de la proliferación de banderas rojas o con la estrella solitaria separatista, y hasta las soviéticas con hoces y martillos. Se escuchaba el Els Segadors y La Internacional. Mientras tanto, miembros del Sindicato Único, asesinan a tres sindicalistas del Sindicato Libre y hieren a otros cinco, y el día 20 otros dos son asesinados. En el centro de la capital, una multitud apedrea los escaparates de algunas tiendas y asaltan los mercados. En el Ayuntamiento, tras ser nombrado el nuevo alcalde, éste al salir al balcón para pedir orden, el público le contesta pidiéndole "armas y dinero". Ese día la cárcel celular fue atacada por manifestantes que pedían la libertad de los presos políticos, pero como el director no estaba de acuerdo, los manifestantes le prendieron fuego a la puerta y la derribaron con picos y mazos, dejando en libertad a unos 600 presos, casi todos ellos por delitos comunes y ninguno político. En la cárcel de mujeres ocurrió lo mismo, siendo destrozado todos los archivos.
Los separatistas entendían que ésta era la oportunidad para proclamar la República Independiente Catalana. Así que el Sr. Maciá se erigía presidente de la República Catalana. Los radicales, por medio de Emiliano Iglesias, se habían apoderado del Gobierno Civil por pocas horas. Maciá amenazó con enviar dos mil hombres armados con orden de asaltarlo. En fin Maciá se salió con la suya. En Madrid el Gobierno trató de llamarle la atención. Marcelino Domingo y Fernando de los Ríos, en unión de Nicolau D´Olwer, fueron designados para gestionar con Maciá una tregua a sus exigencias separatistas. En fin, el presidente catalán cedió, pero no en dejar su nuevo cargo. Llamó la atención el hecho de mandar a un compositor que le hiciera el Himno de la República Catalana, el cual se estrena en un acto especial el día 18.
Surge en el nuevo Gobierno republicano el problema del separatismo catalán, por lo cual el 26 de abril viaja Alcalá Zamora a Barcelona, con la idea de que los catalanes conozcan al "único" Presidente de la República. El recibimiento fue bueno, con gran cantidad de banderas separatistas. Macía, en compañía de Zamora, en el balcón de la Generalidad, expresaba que el espectáculo daba "un rotundo mentís a los que se empeñaban en hacer circular insidias acerca de hipotéticas desavenencias entre el Gobierno de España y el de Cataluña".
Al problema catalán, se le suma el Vasco. El día 15 de abril en San Sebastián, se reúnen los nacionalistas, quienes firman un pacto con la idea de hacerlo llegar al Gobierno en Madrid. En el se anuncia la proclamación de la República Vasca. Ese día, tras la firma de dicho pacto, en San Sebastián grupos separatistas salen a la calle a celebrar, cantando la Internacional Comunista.
En España, tras la proclamación de la II República, los revolucionarios comunistas, a pesar de haber caído la monarquía, tratan de tomar el poder por las armas. En Sevilla el día 15 hay enfrentamientos con disparos entre comunistas y la Guardia de Asalto. Los revolucionarios marcharon causando destrozos a todo lo que veían en su camino. Por lo menos asaltaron dos armerías, apertrechandose con todo lo que allí encontraron. Trataron de tomar la sede del Circulo Republicano, así como el Cuartel del Regimiento de Infantería de Soria, en donde gritaron mueras al ejército y pidieron más armas para combatir a la Guardia de Seguridad. La guardia del Cuartel disperso a tiros y sablazos a los comunistas, declarando el Gobierno Local estado de guerra.
El 17 en Bilbao, intento de asalto del Cuartel de la Guardia Civil en Gallarta por parte de los comunistas que querían apoderarse del armamento.
Pero no solamente los comunistas son los que plantean divergencias a la nueva República. En Barcelona el día 16 de abril, en la Plaza de toros de las Arenas, la Confederación Anarquista Internacional realizó un mitin, en donde uno de los oradores, Sr. Delabille, atacó al Clero, de quien dijo que con sus bienes se podría dar dinero a los sin trabajo. Arremetió contra Alcalá Zamora, diciendo que los ha engañado, enviando al Gobernador de Sevilla, para que ametralle al pueblo. Señala Delabille que "hay que echar a Alcalá Zamora de la misma manera que al Rey". En dicho acto, un grupo de personas protestó por los términos en que se expresaban los oradores, produciéndose incidentes. En fin, de esta forma se comprueba la vinculación del apoyo anarquista a los amotinamientos comunistas.
En cuanto a la persecución religiosa, el día 15 el Ayuntamiento de Gijón acordó que se expulsara de España a la Compañía de Jesús.
Ya en el ambiente existe un pretexto para quemar las iglesias: Su apoyo a la monarquía. Más adelante tocaré éste tema.
En esos días, en diversos pueblos en donde la monarquía obtuvo mayoría de votos, actuaban las llamadas Juntas Revolucionarias, las cuales no permitían que tomaran los seguidores del Rey, posesión de los ayuntamientos. En cuanto a los concejales monárquicos, estos tenían, antes de tomar el cargo, jurar defensa a la República. El día 24 de abril en Zaragoza, el gobernador civil ha suspendido a 38 ayuntamientos de esa provincia, en los que habían salido electos concejales monárquicos, con la idea de que se organizaran nuevas elecciones. En Ciudad Real, fueron anuladas las elecciones en donde triunfaron los monárquicos. En Callosa de Segura (Alicante) los albistas lograron 12 puestos, y la Unión Monárquica 5, destacándose que durante las elecciones, en los colegios hubo la presencia de notarios que certificaron la legalidad de dicho proceso, y al proclamarse la República, los republicanos socialistas que no habían conseguido ningún puesto, formularon una reclamación ante el nuevo gobernador civil interino, designando a 4 representantes de la conjunción republicano socialista, los cuales se posesionaron del mando en dicho Ayuntamiento, procediendo a dejar cesantes a todos los funcionarios, empleados, etc., y ser sustituidos sin tramite legal, por personal de tendencia socialista. En Vigo, los 19 concejales monárquicos fueron perseguidos y golpeados con palos, los cuales se vieron en la necesidad por amenazas de muerte, de dejar sus cargos. En Priego (Córdoba), la monarquía gana en todos los distritos, siendo electos 16 concejales que son destituidos por socialistas. En Valdetorres (Madrid), 6 concejales monárquicos también son destituidos. En Guernica ocurre lo mismo. En Lugo, en 30 ayuntamientos no salió electo ni un solo republicano socialista, llegando estos al poder gracias a llamadas comisiones gestoras, órgano creado exclusivamente por los socialistas y amparado por la nueva República, con el fin de destituir a todos los funcionarios monárquicos electos legalmente. Las violaciones al sistema electoral se hizo a diestra y siniestra. Para dar una idea global, a comienzos de mayo, el Ministro de Gobernación, señalaba que existían 2.700 expedientes electorales, en donde se pide nulidad y repetición de elecciones.
En fin, en los ayuntamientos en donde hay mayoría monárquica, éstos no se instalan, siendo sustituidos por comisiones gestoras republicano socialistas, que ilegalmente asumen el poder. ¿ Se le podría llamar a esto, el pleno ejercicio de la democracia en la nueva República ?.
Llama poderosamente la atención que de los resultados adulterados en dichas elecciones, en donde salieron electos 5.775 concejales republicanos, frente a los 22.150 monárquicos, los resultados completos no se publicaron jamás, gracias a la posición del nuevo "gobierno legítimo" republicano.
Para el 31 de mayo, el Gobierno repitió elecciones municipales en los lugares suspendidos por la coalición republicano socialista, destacándose que la abstención de elementos monárquicos y de derecha fue la nota de dicho proceso viciado.
Las situaciones de violencia revolucionaria señaladas anteriormente, motivó a más de un monárquico a dejar su empresa, trabajo, casa. Muchos se marcharon al exterior. El Gobierno por su parte solamente indicaba que eran casos de personas acomodadas, y no les daba la importancia. El hecho es que muchos de estos exiliados, no eran aristócratas y políticos de significación monárquica. Lamentablemente, hoy, cuando se habla de refugiados, se refiere solamente a los republicanos de 1939. Pero nadie dice nada de los monárquicos de 1931, y sobre todo, de los católicos entre 1931 a 1939.
El Ministro de Guerra, Sr. Azaña, dicta un decreto, en donde le abre la puerta a todos los jefes y oficiales que deseen abandonar la carrera si les disgusta continuarla bajo el régimen republicano, concediéndoles "el paso a situación de retirado, con el mismo sueldo que disfruten actualmente en su empleo y cualquiera que sean sus años de servicio". Resultado: Más de diez mil jefes y oficiales de todas las Armas y grados se acogieron al decreto y solicitaron el retiro. Con ello el Gobierno eliminó a unos posibles diez mil (algunas fuentes seis mil quinientos) futuros desestabilizadores pro monárquicos, que podrían causar problemas a la hora de alguna intentona militar. También la idea estaba en negar toda participación en el régimen de fuerzas, movimientos o tendencias políticas, o todo aquello que no cuadrase a republicano socialista, creándose un monopolio que ni el general Primo de Rivera, durante la dictadura, tuvo en sus manos.
En el caso de la "reorganización" del mundo militar, esta fue cumpliéndose a lo largo de los meses de mayo, junio y julio, suprimiéndose las Capitanías Generales y el cargo de gobernador militar, quedando reducidas a la mitad el número de divisiones que componían el ejército metropolitano, y ocho divisiones orgánicas fueron base de la nueva estructura militar de la península. Desaparecieron los grados de capitanes y tenientes generales con lo cual la graduación máxima fue la de general de división. Se anularon los ascensos concedidos por elección y por méritos de guerra, quedando en los políticos la tarea de las promociones a los grados superiores, como el de los generales, que dio a entender que para estar un militar en esa promoción, había que meterse en el grupo de amigos, pedir favores, en fin, se politizó la jerarquía militar.
Fue motivo de indignación en la esfera militar, la creación del llamado Gabinete Militar, integrado por un reducido grupo de oficiales, que se caracterizaron por su poca graduación, seleccionados por motivos exclusivamente políticos o de amiguismo, que asesoraban al ministro de guerra, de acuerdo con criterios en ocasiones sectarios o personales.
Llega el 1 de mayo, día del trabajador, para lo cual el Gobierno autoriza las manifestaciones socialistas, comunistas, anarquistas, con la condición de que no se presenten incidentes violentos. En la capital no paso nada, pero en Bilbao, los comunistas tras finalizar un acto, organizan desordenes en los que participa la pasionaria, y en donde los revolucionarios bien armados con armas de fuego, disparan contra las fuerzas de seguridad. La idea abortada de los comunistas era la de enfrentarse a tiros a una manifestación socialista. La violencia comunista causó 25 muertos.
En Barcelona durante el día del trabajador, hubo desordenes con asalto al mercado de la Boquería, así como un fuerte tiroteo frente al Palacio de la Generalidad, en donde grupos de manifestantes tras participar en dos actos comunistas, querían entrar con sus banderas rojas, siendo el resultado: un guardia muerto, que tras tratar de cumplir con su deber, cayó herido en la calle, siendo salvajemente rematado a tiros, palos y patadas por la multitud. Llamó la atención que en los desordenes participó gran cantidad de comunistas franceses. El día anterior un grupo de 100 comunistas asaltaron y destrozaron el mercado San Antonio. Lo interesante de todo esto, es la versión oficial del Gobierno de Macía, que dice que en los desordenes sólo participaron miembros del Sindicato Libre y de la Unión Patriótica, y que sólo hubo un detenido del Sindicato Libre. En la versión del Gobierno si se reconoce que hubo una delegación de comunistas frente a la Generalidad, pero yo no me explico como dos grupos (monárquicos y comunistas) que tienen ciertas divergencias, estén en un mismo lugar armados, sin provocarse una masacre. Con ello se demuestra que la versión del Gobierno en cuanto a la participación del Sindicato Libre y la Unión Patriótica es falsa.
Para dar una idea de las exigencias con motivo del 1 de mayo, en Barcelona en el Palacio de Bellas Artes, se congregaron unos 25 mil anarquistas, pidiendo, entre otras cosas, la incautación de bienes a la Iglesia. En Sevilla grupos izquierdistas pedían el reconocimiento de la U.R.S.S.; armamento del proletariado y desarme de los Cuerpos armados; constitución de los Soviet de obreros, campesinos y soldados, etc., etc.
El 5 de Mayo, Trotsky, en la isla de Prinkipo, redacto los "10 mandamientos del comunista", de los cuales, resaltan los siguientes:
¨I .- Se debe procurar la detención de los personajes monárquicos más significados, la confiscación de los bienes de la Monarquía y de la Grandeza y el armamento del proletariado.
II .- El Gobierno -de la República- es un Gobierno de explotadores. El proletariado deberá mantenerse en oposición irreconciliable.
III .- Los choques violentos de los obreros con los jefes socialista irán en aumento...
VII .- Los comunistas lanzarán las consignas más radicales: voto desde los dieciocho años, creación de milicias, confiscación de bienes, concesión de derechos políticos a los soldados, separación de la iglesia.
VIII .- La consigna central es la del "Soviet" -desde Moscú- , que debe ser popularizada mediante propaganda incansable...¨.
Como se puede apreciar, el comunismo internacional desea tener a España entre sus manos.
LA QUEMA DE CONVENTOS
Pareciera que para muchos, a partir del 10 de mayo, hasta el día 12 que "oficialmente" terminan los actos vandálicos, son los únicos días en que la iglesia durante la II República sufre persecución. Pero esto no es así. Por ejemplo, pocos días antes, el 1 de mayo, en un pueblo de Palencia, el párroco de Villalafuente, el anciano don Sotero de Diego, es cruelmente asesinado. A éste buen hombre, le fracturaron totalmente la base del cráneo, le propinaron 12 heridas de importancia en diferentes partes del cuerpo, le desfiguraron el rostro a fuerza de golpes, le rompieron completamente un brazo, y el ensañamiento fue tal, que le clavaron un palo en el suelo. En cuanto a hechos posteriores al día 12, el 20 en San Sebastián, es incendiado el convento de Benedictos de Lazcano. El día 21, el ayuntamiento de Barcelona acuerda expulsar a los Jesuitas, etc., etc. Es imposible numerar la cantidad de hechos en contra de la iglesia. Hay que recordar, que gracias al triunfo del Frente Popular en 1936, se repite la ola incendiaria, que muchos también desconocen. En relación con éste tipo de hechos, trataré de reflejarlos más adelante.
10 de mayo de 1931. Ese día los monárquicos madrileños inauguran sus nuevas oficinas en la calle Alcalá, contando con anterioridad con una autorización expresa del Gobierno. Tras terminar el acto, surge por toda Madrid el rumor falso, y mal intencionado, de que un grupo de monárquicos asesinaron a un trabajador. Una muchedumbre se reunió frente al edificio de la nueva sede monárquica con la idea de asaltarlo. Las turbas iban por las calles saqueando tiendas, y sobre todo buscando las de armería. Los primeros grupos fueron contra la sede del diario ABC con el propósito de asaltarlo y incendiarlo. La fuerza pública hizo frente, causando dos muertos, que gracias a los falsos rumores difundidos por los agitadores, se llegó a decir que fue una masacre, víctimas de una lluvia de flechas envenenadas que aseguraban habían partido de las ventanas del periódico. Es de resaltar, que el Gobierno, para calmar los ánimos de saqueo a la sede del ABC, colocó un letrero en la entrada que decía: "EL GOBIERNO DE LA REPÚBLICA SE HA INCAUTADO DE ESTE EDIFICIO". El director del diario, Juan Ignacio Luca de Tena, fue encarcelado, y "ABC" sufrió su primera suspensión, que duró hasta el 25 de junio. Mientras tanto, la agitación y los rumores mal infundados siguieron toda la tarde de ese día 10 de mayo.
Los agitadores empiezan a gritar: "¡Mueran los Jesuitas! ¡Hay que quemarles el convento!."
Más tarde, el que era entonces secretario del Comité Central comunista, Enrique Matorras, señaló que ese día en una reunión de los jefes comunistas de Madrid "Además de los dirigentes locales, asistían al conciliábulo dos miembros del Secretariado General y una delegación de la Internacional. Acordándose planear la huelga general, aconsejar el asalto a las armerías y la fraternización de los soldados y obreros. Había que aprovechar cualquier manifestación para lanzar las consignas de los soviets y provocar el alzamiento contra el Gobierno provisional. Se resolvió, además, dar órdenes concretas a las células comunistas con respecto a determinados incendios".
Este programa empieza a realizarse desde las primeras horas de la mañana del día 11 de mayo. La huelga, iniciada la noche anterior, es general. Queda paralizada la circulación; se distribuyen hojas subversivas y los guardias son silbados e injuriados. La Puerta del Sol empieza a llenarse de grupos con puños en alto. Se repetían los gritos: "¡Abajo los conventos!. ¡A la Gran Vía!. ¡Mueran los Jesuitas".
Los grupos fueron a la residencia de los padres de la Compañía que tenían en la calle Flor. Rociaron la puerta principal con gasolina, y empezó a arder el edificio, extendiéndose el fuego a otros lugares. Los guardias, cumpliendo instrucciones del Gobierno, se abstuvieron de actuar, y otro tanto ocurrió a la llegada de los bomberos. Esta actitud alentó más a los exaltados, que decidieron echar más gasolina a la iglesia, y convierten el lugar en un infierno de llamas. Los padres jesuitas tuvieron que escapar por tejados y azoteas ante las amenazas de muerte, con insultos y golpes. Ardieron numerosas obras de arte incalculables, entre ellas una biblioteca de 90.000 volúmenes, en donde se conservaban ediciones únicas.
Siguió el convento cercano de las Vallecas de las religiosas Bernardas, en donde una turba saqueó y incendió el edificio. Ardía a la 1 de la tarde la iglesia de Santa Teresa en la Plaza España. A la 1:30 le tocó el turno al Instituto Católico de Artes y Industrias (I.C.A.I.) en la calle de Alberto Aguilera, en donde se quemó una biblioteca de 20.000 volúmenes. Cinco columnas de humo manchaban el cielo de Madrid.
Los ministros reunidos en la presidencia deliberan sobre los sucesos. A las protestas del ministro de Gobernación de que saliera la Guardia Civil a restablecer el orden, el Sr. Azaña contestó: "Eso no. Todos los conventos de Madrid no valen la vida de un republicano".
A las tres de la tarde, Madrid se ilumina con una nueva hoguera: Arde el colegio de las Maravillas, convirtiéndose en un montón de escombros. Con él se perdió mucho material científico y un magnífico museo de mineralogía. A doscientos metros, se encontraba el convento de las Mercedarias de San Fernando. En esta oportunidad al robo y al incendio se une la profanación, al ser desenterrado el cadáver momificado de una religiosa que falleció en 1864, el cual pasearon en forma de parodia, sacando otras cuatro momias y un cadáver enterrado quince días antes, los cuales arrojaron al fuego. Ante estos excesos de bestialidad, muchos de los espectadores levantaron murmullos de protesta. En el mismo barrio, las iglesias parroquiales de Bellas Vistas y la del Colegio de las Salecianas, ardieron en llamas. Finalmente, ese trágico día lunes, termino con el incendio del colegio de Religiosas del Sagrado Corazón, de Chamartin de la Rosa. Resultado final: Diez centros religiosos hechos cenizas, con centenares de personas que quedaron sin hogar; miles de niños sin escuela, y una desilusión de muchos que creyeron en una República digna y honrada.
El ejemplo de Madrid, alcanzó otras provincias. En Málaga, se alcanzó proporciones de catástrofe. El convento de las religiosas del Servicio Domestico, fue visitado por los "revolucionarios". La residencia de la Compañía de Jesús fue incendiada. Al día siguiente arde al Palacio Episcopal. A las tres de la madrugada ardían los colegios de los agustinos y de los maristas; a las cuatro le toca el turno al periódico "La Unión Mercantil". De allí se extendió la ola incendiaria al convento de Santo Domingo, al Palacio Arzobispal, al centro de los Agustinos, así como el de los Jesuitas, y la sede de los Capuchinos. En la iglesia parroquial de San Pablo, en el barrio de la Trinidad, las criptas fueron violentadas, y la cabeza del antiguo párroco de aquel templo, que había sido apóstol de aquella barriada, era paseada prendida en la punta de un palo por las calles.
La violencia al amanecer se extendió en Málaga a los asilos, hospitales y almacenes. Ardieron el colegio de la Asunción y saquearon el de la Sagrada Familia, el de las Adoratrices, el de San Carlos. Fueron quemados los conventos del Ángel y el de las Mercedarias, así como las iglesias de San José de la Montaña y de la Merced, San Felipe Nerí.... En total, fueron 48 edificios religiosos saqueados o incendiados. El patrimonio histórico, cultural que se perdió es incalculable.
En un libro escrito por el ministro de la Gobernación de entonces, Miguel Maura, y titulado "Así cayó Alfonso XIII", en cuanto a los sucesos de mayo de 1931, comenta lo siguiente:
"Era gobernador de esa provincia cierto amigo de Alcalá Zamora, llamado Antonio Jaén...". "Mandaba la guarnición de Málaga el general Gómez Caminero...". "Parece que, desde la primera hora de la mañana, las gentes del barrio del Perchel se echaron a la calle, arrastrando en la riada a cuantos hallaron a su paso. El gobernador, que acababa de llegar de Madrid en el expreso y que había sido testigo de lo sucedido en la capital, propuso a Gómez Caminero hacer frente al conflicto...".
"Ambos del brazo, salieron al encuentro de las turbas y, tras unos discursos de circunstancias, acordaron que podían los manifestantes quemar simbólicamente no sé que capilla desafectada, situada en las afueras de la ciudad. Allá fueron juntos, autoridades y turba; para dar la representación del espectáculo, prendieron fuego a la capilla, y el pueblo, entusiasmado, aclamó a las autoridades verdaderamente "populares" que, una vez consumado aquel insólito hecho, pretendían que la manifestación se disolviese. Pero no lo entendieron así los manifestantes, sino que, tomaron a los dos peleles jerarquizados en hombros, los condujeron, entre aclamaciones y victores, frente a otras iglesias y conventos, y uno a uno y siempre en presencia de las dos autoridades --el Excmo. Sr. gobernador civil y el Ilmo. Sr. gobernador militar -- ardieron los 22 conventos e iglesias de Málaga..."
En Sevilla, en la anochecer del día 11, tras llegar los rumores de lo ocurrido en Madrid, es quemado el colegio de los Jesuitas. La iglesia del Buen Suceso, de los Carmelitas, es saqueada y quemada. Un monumento nacional, expresión perfecta del barroco sevillano, la capilla de San José, perteneciente a los Capuchinos, es convertida en un montón de ruinas.
En Córdoba, es quemado el convento de San Cayetano.
En Cádiz, arde el convento de los Dominicos, la iglesia de Santa María y el convento del Carmen. Los desordenes se propagaron a otras poblaciones de la provincia. En Sanlúcar de Barrameda ardió el convento de los capuchinos; en Algeciras fueron saqueadas las iglesias. En Jerez de la Frontera fueron asaltados el convento de San Francisco, el de los Carmelitas, los de las mínimas y reparadoras y la residencia de los Jesuitas.
En Valencia, es quemado el convento de los Dominicos. Es saqueado y quemado los colegios de las Teresianas, el de los Padres Capuchinos, y el colegio de las vocaciones. La residencia de los Padres carmelitas fue incendiada. Víctima del saqueo son la residencia de los Padres Salecianos y el convento de las religiosas Salecianas, así como el convento de las Agustinas, y el convento de las Carmelitas que terminó en llamas. También es saqueado el colegio de Santo Tomas y la residencia de los Jesuitas, así como su seminario.
En Murcia es incendiado el diario "La Verdad". Los incendiarios fueron al templo gótico de la Purísima, al que primero destrozaron, y luego prendieron fuego. Saquearon el convento de las Isabelas, el de Las Verónicas ...
En Alicante son incendiadas las Escuelas Salecianas, el convento de San Francisco, el colegio de las carmelitas, la Parroquia de Benalúa, la casa de ejercicios de la Compañía de Jesús, el convento de las Oblatas, la iglesia del Carmen, la residencia de los Jesuitas, los conventos de Capuchinos y Agustinos, el Palacio Episcopal, el colegio de la Compañía de María, el de Jesús y María y el de los hermanos Maristas.
Hubo escenas espeluznantes, a nivel de salvajismo que dominó en Madrid y Málaga, sobre todo con el saqueo de sepulturas religiosas.
Tras terminar la ola incendiaria, en donde se estima que fueron quemados más de un centenar de edificios religiosos, el Gobierno saca la tropa a la calle. En cuanto a los responsables, según el "Heraldo de Madrid", "los frailes de la Flor habían disparado sobre los obreros", dando con ello la justificación de los actos incendiarios. Para "La Voz", todo lo ocurrido no era "más que una maniobra monárquica aprovechada por los elementos enemigos del régimen". Divulgaron varios periódicos la noticia de que un comité monárquico "compuesto por gentes adineradas y por canónigos, se había dedicado a repartir hojas subversivas para excitar al pueblo a destruir los edificios religiosos, complicando su programa con anónimos a los conventos y casas particulares".
El Gobierno, en una nota, confirmaba que los sucesos se habían producido merced a un complot monárquico-comunista para derrocar la República. El fiscal, aseguraba que lo sucedido tenía su origen en París y que el conspirador principal era el propio Rey, secundado por los ex ministros de la Dictadura. En fin, me pregunto quién se puede imaginar que monárquicos y comunistas se pongan de acuerdo para quemar iglesias?.
"El Socialista", órgano oficial del Partido Socialista, afirmaba: "La reacción ha visto ya que el pueblo está dispuesto a no tolerar. Han ardido los conventos: esa es la respuesta de la demagogia popular a la demagogia derechista". Para el Comité ejecutivo del partido republicano radical-socialista, la quema no era más que una protesta realizada contra los manejos de los "residuos de la Monarquía". Y la Federación de Sindicatos Únicos de Barcelona elogiaba "el gesto magnífico del proletariado y el alto ejemplo de vigor y energía revolucionaria".
Como se puede apreciar, hay cierta contradicción en cuanto a quienes son los responsables de los sucesos incendiarios. Se conoce que el Gobierno ordenó a las fuerzas de seguridad que no intervinieran hasta que llegara la calma. Posteriormente el Gobierno busca responsables en los sectores de derecha, quienes son perseguidos y encarcelados.
Para dar una idea en cuanto a la investigación seria por parte de las autoridades, de buscar los responsables de la quema de iglesias, el día 21 de mayo (11 días después de los sucesos), en lo que quedaba del Instituto Católico de Artes y Industria, se presentó un inspector de policía acompañado de varios agentes y guardias cívicos, para realizar en cumplimiento de ordenes superiores, un registro en busca de armas y un paso secreto entre los talleres del instituto y el resto del edificio. Creo que con esto, no hace falta más comentarios.
Un detalle de la visión del Sr. Alcalá Zamora, y sobre todo frente a los medios de comunicación, es que en todos dichos sucesos, sólo hubo 4 muertos en Madrid, y 2 en Córdoba. "Solo 6 muertos!", manifestaba con cierto orgullo. También es de resaltar la censura con el cierre de periódicos, como "Debate", que permaneció más de una semana sin publicar, o el diario ¨ABC¨ que duro casi un mes sin salir a la calle. Al gobierno no le interesaba que diarios de tilde católico informaran sobre las atrocidades cometidas contra la Iglesia, siendo la vía más efectiva el tratar de clausurarlos, sin tener una base legal para ello. Estos diarios tuvieron la suerte de seguir, gracias a las sendas reclamaciones al Gobierno. Pero algunos no tuvieron esa suerte como "El Defensor de Canarias" de Las Palmas, o "La Unión Mercantil" de Málaga, que quedaron hechos añicos gracias al fuego revolucionario.
Como punto final, algunos se preguntaron el porqué los católicos no salieron a la calle a defender sus iglesias con palos y piedras. Es posible que muchos de los incendiarios estaban armados con pistolas, y una pistola puede más que un palo. La tesis que yo creo es que los comunistas provocaron los incendios para ver si los católicos o algunas fuerzas del Gobierno como la Guardia Civil, salían a la calle, para así caerse a tiros y justificar su revuelta revolucionaria. Pero como el Gobierno sabía de antemano esas intenciones, para no perjudicar el nombre de la República como un gobierno represivo, prefirió cruzarse de brazos, y esperar echarle la culpa a la derecha.
Como dato curioso, a mediados de mes, la Confederación Federal de Trabajo convocó una huelga para protestar porque la Guardia Civil no permitió que "el pueblo" quemara la sede del diario ABC. Es de resaltar que los grupos de izquierda, a través de sus diversos medios de comunicación, trataron de desarrollar una campaña difamatoria en el sentido de que en los saqueos y incendios de iglesias, participó de forma llena el pueblo, cuando la realidad fue que quienes actuaron fueron grupítos vandálicos.
El gobierno sigue de lleno con su política anticlerical, y el día 18 de mayo, el obispo de Victoria es invitado a salir de España, con el pretexto de que utilizaba su cargo para hacer política. Lo curioso de esto es que tres días más tarde, el gobierno publica un decreto sobre libertad de conciencia y cultos. Pero a pesar de ello, a la iglesia se le prohibe emitir algún tipo de comentarios. Entonces, para qué es dicho decreto ?. En fin, existía la seculación de los cementerios, separación de la Iglesia y del Estado, prohibición de las autoridades gubernativas y al Ejército de participar en actos religiosos, supresión de honores al Santísimo Sacramento a su paso por las calles, supresión de la obligatoriedad de la enseñanza religiosa en las escuelas primarias y en las superiores, prohibición del crucifijo en las escuelas, intervención del Estado en el tesoro artístico de la Iglesia, etc. La persecución contra la Iglesia se incrementa.
A mediados de junio, con motivo de una pastoral del Cardenal Primado, Dr. Segura, el Gobierno, "estimando peligrosa la permanencia del Cardenal en España", acuerda rogarle que abandone el país. El hecho es que el Cardenal es detenido en Guadalajara por una pareja de la guardia civil, siendo conducido hasta la frontera. "El Socialista" del 18 de junio decía: "El cardenal Segura es una mala persona que no debe vivir en un pueblo que aspira a dignificarse".
Es de resaltar, que frente a la campaña anticlerical de Gobierno, en toda España, grupos católicos, encabezados por Acción Nacional como grupo político, y otras organizaciones, desarrollan diversidad de actividades (recolección de miles de firmas, asambleas públicas, marchas, etc.) para pedir el fin de la persecución religiosa, destacándose que la violencia nunca formó parte de dichos grupos pro católicos. Pero otra era la actitud que asumía el Gobierno frente al reclamo de los grupos pro católicos. En muchos ayuntamientos a dichos grupos se les impuso multas, suspensión de actos, detención arbitraria o persecución de las personas que recogían firmas, o participaban en dichas campañas.
Insisto, no entiendo como hoy hay personas que manifiestan que en la España de la II República existía un estado de derecho.
La epidemia de huelgas y con algunas de ella la violencia "proletaria", invade a España: Estado de guerra en Cádiz el 24 de mayo; el 26 estalla una huelga minera en Soria (Barcelona); Disturbios el día 27 en Pasajes (San Sebastián) con saldo de seis muertos, declarándose el estado de guerra; día 28, huelga general en Asturias; el 29 paro total en Gijón; 1 de junio, huelga minera general en Asturias; el 8 de junio se declara otra en Bilbao; a mediados de ese mes, en Sevilla se declara el estado de guerra gracias a la violencia de los huelguistas; en Pasajes los huelguistas del puerto chocan con la tropa cuando avanzan levanticos sobre San Sebastián, con saldo de seis muertos y cinco heridos; el 13 de junio en Montemoin (Badajoz) es linchado un guardia civil, tras intentar evitar una agresión por parte de un grupo de agitadores a la casa de correos; huelga general el 17 de junio en Gerona, declarándose el estado de sitio; desordenes el 23 de junio en Huelva con seis heridos; el 24 huelga en Córdoba; en Orense concentración de obreros, con asalto al Gobierno Civil; huelga de tranvías el día 26 en Valencia; ese mismo día, huelga de peones albañiles en Granada; el 27 huelga general en Orense; el día 28, choques sangrientos en Barcelona, las Herencias, Alamedilla, Villanueva de las Torres y Vergara, con el resultado de quince muertos y setenta heridos; el 29 paro general en Granada y Málaga con saldo de tres muertos y numerosos heridos; para el 2 de Julio, huelga general y estado de guerra en Logroño, con saldo de un guardia muerto y quince heridos; el día 3, huelgas en Málaga y Melilla...
En Extremadura y Andalucía las cosas eran peores. Gracias al desempleo y el hambre, los agitadores ofrecían a cambio de motines y sublevaciones, el reparto de tierras. Se pusieron de moda los incendios de cosechas, el sacrificio de ganado, así como el asalto a los edificios públicos, o el asesinato de patronos "burgueses" en diversos pueblos de Córdoba y Sevilla. Éste tipo de actividades era impulsada por los "revolucionarios".
En cuanto al funcionamiento del sistema educativo, a comienzos de junio, el Gobierno plantea la salida de profesores, claro, tratando de aplicar un sistema de limpieza antirrepublicana, parecido al que se hizo en el mundo militar, para así manipular el sistema educativo. En la universidad, se decreta que la F.U.E., elemento esencialmente izquierdista en la violencia "estudiantil" en los últimos días de la monarquía, se le de un papel activo en la comunidad universitaria, quedando marginados los demás grupos como la Confederación de Estudiantes Católicos, quienes plantean que, dicha decisión, crea un monopolio de representación manipulada que no cuenta con el apoyo de la mayoría de los estudiantes matriculados. Y esa era una gran realidad.
El 28 de junio se realizan elecciones para designar los diputados que han de componer las cortes constituyentes. Es de resaltar, que en la campaña electoral para dichos comicios, las izquierdas hicieron los que les dio en gana, mientras que todo aquello que pintara a derecha, fue suprimido o censurado por el gobierno. El triunfo de socialistas y republicanos fue aplastante, gracias al reparto de las actas, y gracias también a que los socialistas hacen valer su organización electoral. Para dar una idea de la manipulación, los socialistas sacaron 117 diputados, y a los Monárquicos solo le dejaron 1. Durante la campaña electoral, para dar una idea de lo que fue la persecución de las derechas, se puede destacar lo siguiente:
El 19 de junio en Oviedo, en el teatro Campo amor, el partido Liberal Demócrata, organiza un acto electoral, en el que grupos de revoltosos entraron a la fuerza dando vivas a la República Soviética, siendo los asistentes al mitin apedreados por los agitadores. La Guardia Civil interviene disolviendo el tumulto. Los revoltosos, deciden asaltar la sede del partido Liberal Demócrata, destrozando todo lo que había en dicha sede. Tras éste incidente, muchos grupos de derechas, conservadores y pro-monárquicos, deciden no participar en las elecciones.
El día 22 tenía previsto realizar un mitin en Madrid Acción Nacional. El Ministro de la Gobernación habló con los organizadores de dicho acto, y les señaló que había informaciones de que "algunos perturbadores estaban decididos a interrumpir su celebración". Ya como existían muy serios antecedentes como lo ocurrido en Oviedo, los organizadores suspenden el acto.
Ese mismo día, en Lucena, Córdoba, es suspendido un mitin de Acción Nacional, por el delegado de la autoridad.
El 23 en Ciudad Real, un mitin de derecha liberal, es suspendido, así como otro de la centro derecha liberal en el pueblo de Almoradi, en Alicante. En Sevilla son apedreados propagandistas de Acción Nacional.
En Barcelona, el día 23, un mitin de la Lliga regionalista y los jaimistas es víctima de un grupo de agitadores que agreden a pedradas a los oradores cuando se retiraban, tras ser suspendido el acto por razones de fuertes amenazas por parte de grupos de agitadores izquierdistas. También en Figueras, Rivas y La Bisbal son suspendidos actos de la Lliga, ante los desordenes de grupos izquierdistas. Un grupo de candidatos de la Lliga manifestaron ante diversas instancias, que la izquierda catalana se atribuye la representación del poder público, perturbando las reuniones de tilde derechista, fomentando agresiones.
El día 26 en la Plaza de toros de Daimiel de Ciudad Real, es suspendido un mitin de la Derecha Liberal Republicana.
En Valencia el 27, el Ayuntamiento de Sieca, acordó imponer un impuesto de 25 céntimos por derecho de timbre a los carteles de candidaturas católicas, mientras que a los de izquierda no.
El día 28, durante las elecciones, se producen tumultos, con un saldo de dos muertos. En Vergara (San Sebastián) enfrentamientos que dejan un muerto. En Badalona, un grupo de comunistas tiroteó un camión, muriendo un guardia cívico.
Con éste ambiente, una gran masa de electores se abstuvo de participar en dichas elecciones. Según el Ministro de la Gobernación, Sr. Maura, "No había votado ni el sesenta y cinco por ciento del cuerpo electoral". Si esta es una cifra oficial adulterada, que se puede decir de la cifra real !.
Es de resaltar, que en éste proceso viciado por el Gobierno, fueron electos "formalmente" las nuevas autoridades del Parlamento, que discutiría y aprobaría con amplia mayoría la nueva Constitución republicana, destacándose el famoso artículo 26, que condena a las ordenes religiosas y destaca la confiscación de sus propiedades, así como la prohibición del ejercicio de la industria, el comercio y la enseñanza a los católicos. Es decir, el Gobierno Republicano podía hacer en gana las nuevas leyes con su amplia mayoría. También es de resaltar que ese nuevo Parlamento -por amplia mayoría- elegiría a Alcalá Zamora como Presidente en diciembre.
El 29 de junio, la Academia General Militar de Zaragoza, que fundó y dirigió el General Francisco Franco, se suprime por un decreto. Es decir, de un plumazo, se cierra la mejor academia militar de España. El ministro de guerra francés, quien la visitó un año antes, dijo: "Es, no ya un organismo modelo, sino el Centro, en su género, más moderno del mundo. España puede ufanarse de que la Escuela de Oficiales es la última palabra de la técnica y la pedagogía militar...".
El mes de julio se estrena con un acontecimiento en la Coruña: El día 1 en el barrio de Santa Lucia, un grupo de individuos que participaron en una manifestación sindicalista, agreden a piedra limpia los edificios de los jesuitas y maristas, y posteriormente deciden incendiar el convento de los Capuchinos, ardiendo adicionalmente cinco casas. Dentro de las casas en llamas, estallaron petardos que eran lanzados por los agitadores, y éstos decían que las detonaciones eran municiones que tenían escondidos los frailes dentro del convento. La Guardia Civil trató de hacer frente a los agitadores, pero no pudieron. Entonces el Gobernador decide sacar fuerzas del Ejército para poner el orden, y en la refriega, se producen seis heridos. El día 6 estalla un paro general en la Coruña, en protesta por la represión de la Guardia Civil contra los incendiarios. Es de resaltar, que éste tipo de situaciones, en donde grupos vandálicos de extrema izquierda, tras organizar serios incidentes, y ser detenidos algunos de sus miembros agitadores, una vía utilizada por sus dirigentes para presionar a las autoridades para que sean liberados sus compinches, es la convocatoria de marchas, huelgas generales, o la utilización de la extrema violencia en las calles. Un buen ejemplo de ello, fue lo ocurrido en Ceuta, en donde tras organizarse una huelga de camareros, en algunos cafés y bares que no acataron el llamado de huelga del Sindicato Único, cinco miembros de dicho sindicato, se dedicaron a destrozar dichos comercios. Tras ser detenidos los agitadores por la autoridad local, el sindicato convocó otra huelga pidiendo la libertad de los detenidos.
El 2 de julio en Logroño, se registran numerosos enfrentamientos entre fuerzas de orden público y agitadores. El Gobernador civil trata de mediar y es herido de dos disparos. Un guardia de seguridad es muerto y hay numerosos heridos. Se declara el estado de guerra. Ese mismo día, estalla un paro absoluto en Melilla, en donde los militares salen a la calle para atender los servicios de agua, luz y hospitales.
El 6 de julio se produce la huelga de Telefónica, organizada por la C.N.T., que se llevó a cabo con gran violencia, cometiéndose sabotajes contra la empresa. Cayeron líneas de conducción, se destruyeron máquinas y gran cantidad de instalaciones. El día 22 estalló en pleno centro de Barcelona una bomba en una cámara de redes telefónicas, que dejo incomunicado por muchos días una de las partes más vitales de la ciudad.
A la situación de telefónica se une: el día 6 huelga de albañiles en Sevilla; día 9 huelga general en Utrera; huelga el día 16 de tranvías en Ciudad Lineal; huelga de los metalúrgicos de Bilbao; los marineros y fogoneros de la Unión Naval; los obreros del puerto de El Ferrol, los de la Hidroeléctrica de Valencia; los mineros de Lorca; los choferes de Huelva; los de la construcción en Córdoba, etc.
En la España de esos días, crece el desempleo, y con ello la inseguridad en las calles, los atracos, y los llamados "crímenes sociales". "El Socialista", el 10 de julio, llega a preguntar: "¿Qué va a volver a ocurrir en Barcelona?". En Barcelona todo el mundo está armado. Los sindicalistas se entregan a toda clase de excesos -y entre ellos los mismos socialistas-. ¿A dónde conducirá a Barcelona esta situación?".
En aquellas fechas, el Ministerio de la Gobernación, anunciaba la desarticulación de un plan revolucionario comunista anarquista en Sevilla, en donde participaban miembros con ideario soviético, secundados por algunos aviadores de Madrid y otros del aeródromo de Tablada, en Sevilla, quienes desde esa base elevaron aviones para arrojar sobre la capital andaluza manifiestos de prosa incendiaria y petrolera que empleaban los agitadores, como el notario Blas Infante, que excitaba a los campesinos a que "administraran la justicia por su mano, se apoderasen de las tierras sin más contemplaciones y dieran por establecido el divorcio, en nombre del mejoramiento de la raza". Para el levantamiento, en el aeródromo de Tablada, se había acumulado una gran cantidad de armamento. El intento quedo aplastado, gracias a la participación del Director General de la Guardia Civil, General Sanjurjo.
El 20 de julio, en la capital andaluza, tras intensos tiroteos con saldo de muertos y heridos promocionado por dirigentes "sindicalistas", estos ordenan a sus afiliados que se concentren en la noche del 20 al 21 en Alcalá de Guadaira, para allí iniciar una marcha sobre Sevilla, la cual fue abortada gracias a la intervención de la Guardia Civil. Mientras tanto, en el pueblo de Dos Hermanas, los revoltosos intentaron tomar el cuartel de la Guardia Civil, con el resultado de diecisiete heridos. Algo semejante ocurrió en Coria del Río, Brenes y Utrera, en la misma provincia.
Ese día, el Ministro de la Gobernación, Sr. Maura, atendía en Madrid a un grupo de periodistas, que le preguntaron: "qué solicitaban los huelguistas de Sevilla?", contestando:
- El desarme de la Guardia Civil, la destitución de las autoridades, asalto a los cuarteles, que se degüellen a los hijos de los guardias y la cabeza del ministro de la Gobernación. Ha sido la CNT la que ha declarado la huelga.
El día 21, Sevilla quedo paralizada con la huelga general, declarada con carácter indefinido. Al siguiente día, los revolucionarios desatan su violencia en el centro de la ciudad, tiroteándose con los soldados del regimiento de Soria, que en unión de la Guardia Civil, ocupaba los sitios estratégicos, estendiendose la pelea a los barrios. El día 22 a las 10:30 de la noche se declaró el estado de guerra. La situación de violencia sigue hasta el día 23, cuando la autoridad militar recibe la orden de acabar con dicha situación, aplicando la máxima energía. Pero ni el anuncio de Consejos sumarísimos, ni la supuesta aplicación de la "ley de fugas", pudo frenar a los sediciosos, quienes a las 12:30 de la media noche, se lanzaban en grupos contra el cuartel de la Guardia Civil en la plaza del Sacrificio. Desde las azoteas inmediatas partían tiros contra el cuartel. Fuerzas de la Guardia Civil y del Ejército, acudieron rápidamente en auxilio de los sitiados, aplacando de casa en casa a los revoltosos. Según los datos oficiales, el resultado de la "semana sangrienta sevillana" fue de veinte muertos y más de doscientos heridos.
En un informe secreto elevado al Gobierno por el gobernador civil de Sevilla, Sr. José Bastos, el 2 de julio, y publicado días después en el diario "El Debate", señalaba como las revueltas arruinaban rápidamente a la provincia; las huelgas insensatas que se sucedían constantemente y el predominio del pistolerismo producían el declive económico de la región. En los campos, millares de cabezas de ganado abandonadas padecían de sed y de la falta de cuidado. Las cosechas en plena recolección quedaban desatendidas y a merced de los elementos incendiarios. Las acequias y canalizaciones destruidas, para aniquilar las plantaciones de regadío. Se multiplicaban los incendios y toda clase de atropellos de cosas y personas. Frente a esto, la actuación de unos guardias civiles suponía bien poco. Y terminaba diciendo: "Estamos ya en plena guerra civil. La República, el menos en la provincia de Sevilla, tiene planteada una guerra..." "Esa guerra planteada por el anarcosindicalismo y el comunismo tiende a demoler el edificio económico", a la "aniquilación del espíritu de empresa" y en suma, a la "generalización de la miseria".
A tres meses de la proclamación de la República en 1931, ya un gobernador hablaba sobre una "guerra civil".
En esos días, la censura de prensa se acentúa. El director general de Seguridad ordena la recogida y destrucción de una edición del periódico "La conquista del Estado", veinticuatro horas antes de que saliera al público. Adicionalmente, los anteriores cinco números fueron recogidos por la policía. La excusa del Gobierno, es que dicho diario utiliza un lenguaje subversivo, cuando en las calles circulan diarios de extrema izquierda, como "El Socialista", que se cansan de insultar al Gobierno y promueven y apoyan levantamientos subversivos en sus páginas. En fin, una arbitrariedad más del Gobierno.
Para el 1 de agosto, Moscú había acordado que el proletario del mundo debería celebrar la "jornada roja". En España sólo hubo incidentes graves en Barcelona, donde un grupo de revolucionarios que cantaban la internacional comunista, llevaban una gigantesca bandera soviética, y como siempre, para no perder la costumbre, deciden usar la violencia con el saldo acostumbrado de heridos. Mientras en otros países como Francia o Alemania, fracaso la convocatoria de dicha jornada.
En cuanto a la independencia catalana, el 2 de agosto se realiza un plebiscito para aprobar un famoso estatuto redactado por el Gobierno provisional de Cataluña. Es de resaltar -como cosa curiosa de esos días violentos- que la votación se realizó sin incidentes, pues nadie se le ocurrió salir a discutir la labor de los independentistas. Como en las mesas electorales no hubo intervención de los partidos, las cifras de votación quedaron sin comprobar y nadie se interesó por discutirlas ni por impedir la suplantación o falsificación. Con éste ambiente triunfó arroyadoramente el estatuto, por lo cual el Sr. Maciá, anunciaba que el día 13 marcharía a Madrid para hacer entrega del estatuto.
Y las huelgas siguen: 4 de agosto, huelga de metalúrgicos en Barcelona, en donde se estiman unos 30.000 participantes; día 4, huelga general en Ecija (Andalucía); día 5, huelga general en Aigeciras (Andalucía); en el mismo día un grupo de huelguistas tratan de asaltar el cuartel de la Guardia Civil en Fuensalida (Toledo); mientras que el Barcelona hay unos 70.000 huelguistas del ramo textil; día 8, huelga general en Bilbao; ese día, huelga de panaderos en San Sebastián; día 12, agitación de huelguistas en Zaragoza y disturbios en Córdoba; etc.
También es de resaltar la violencia comunistas de esos días en Alemania, donde son frecuentes los atentados con bombas y las huelgas -situación parecida a la de España-. En Argentina son expulsados por el Gobierno una delegación comercial rusa, acusada de espionaje y asesoramiento económico y ideológico a extremistas en ese país. En China, se presenta una situación parecida. A finales de agosto, disturbios comunistas en Chile con saldo de muertos y heridos. La agitación comunista se extiende en el mundo.
Durante esos días, se trata de realizar un juicio a la monarquía por medio de una llamada Comisión de Responsabilidades del Congreso. Su tarea era la de juzgar por daños morales a la Nación, concertados en las siguientes categorías: a) Alta responsabilidades en Marruecos; b) Política social de Cataluña; c) Golpe de Estado del 13 de septiembre de 1923; d) Gestión y responsabilidades políticas de las dictaduras; e) Proceso de Jaca.
Durante lo que podría llamarse la primera fase del proceso, son detenidos algunos generales y personalidades de la dictadura de Primo de Rivera. El papel de los socialistas en dicho juicio, se podía decir que fue el de una cacería de brujas hacia los sectores de derechas, al tratar de creer que si algún día se tiene que detener y encarcelar a alguien por responsabilidades en la dictadura, esos son los monárquicos y las derechas. Lo curioso de ello es que el partido socialistas formó parte en el gabinete de la dictadura de Primo de Rivera, en donde ellos indirectamente colaboraron, y es de resaltar que jamás se opusieron a la llegada de Primo de Rivera al poder, claro, mientras él no les persiguiera, y de hecho, no les persiguió. Si la idea del juicio de responsabilidades era el de enviar a la cárcel a todos aquellos que colaboraron con la dictadura, gran cantidad de dirigentes republicanos socialistas de ese momento (concejales, alcaldes, ministros, etc.) moralmente eran responsables. En agosto y septiembre en el Congreso se discutía el papel de dicha Comisión, que en más de una oportunidad ordenó la detención de presuntos responsables, como lo ocurrido el 1 de septiembre con cuatro generales que formaron parte del Directorio Militar constituido a raíz del golpe del 13 de septiembre de 1923. A la lista de detenidos se les sumó el Almirante Cornejo, quien desempeñó el papel de ministro en la dictadura, así como otros generales y ex ministros.
La situación de la llamada prensa de derechas es lamentable en cuanto a su persecución. El día 10 de agosto en Bilbao, es incendiado por agitadores de izquierda el periódico "La Gaceta del Norte". El 21 en San Sebastián, los periódicos "El Día" y "Easo" son clausurados por orden del Gobernador Civil. El Director del diario "La Constancia", Sr. Ortega, es encarcelado por la publicación de un artículo. Ese día en Bilbao, son también clausurados "La Gaceta del Norte", así como los periódicos "El fusil", "Esperanza", "Euzcadi", "La Tarde" y el semanario católico "Adelante". La excusa del Gobierno para dichas clausuras: una campaña de sedición.
El hecho es que dichos periódicos, denunciaban la constante campaña anti clerical del Gobierno, aportando hechos y situaciones reales, así como serias criticas a las llamadas comisiones gestoras creadas para quitarle los puestos a los concejales y alcaldes monárquicos legalmente electos. Resaltaban que dichas "comisiones", tras cuatro y más meses después de ser creadas ilegalmente, seguían funcionando en los Ayuntamientos con elementos socialistas puestos a dedo, sin que se convocaran nuevas elecciones en los ayuntamientos afectados. En fin, en ese sólo día son suspendidos trece periódicos.
Por su parte, los periódicos de izquierda, publicaban cosas peores en contra del Gobierno, pidiendo la libertad de los agitadores de Sevilla, anunciando revoluciones armadas del proletario, apoyando la quema de iglesias, los asaltos a los cuarteles de la Guardia Civil, las huelgas injustificadas, etc. Mientras tanto en los periódicos suspendidos de derechas, no existe una campaña parecida llamando a sus lectores a una huelga general, una revuelta armada, o revolución armada. La Prensa afectada exige al Gobierno que presente una prueba que justifique dichos cierres, y en caso de existir, que sean los Tribunales que juzguen y decidan, y si se comprueba alguna responsabilidad o delito, que sean los Tribunales y no el Gobierno en una forma arbitraria quien tome medidas para sancionar supuestos hechos sin pruebas. Pero cómo el Gobierno es socialista, entiende que su único enemigo son los monárquicos y todo aquello que le pinte a derechas, empleando toda clases de coacciones, persecuciones, de las formas más arbitrarias posibles. Es de destacar, que junto a la prensa escrita, la radio también fue víctima de dicha represión.
El día 23, en Pamplona, son recogidas las ediciones y clausurados los periódicos "Diario de Navarra", "Pensamiento Navarro" y "La Tradición Navarra", por publicar un documento de la Asociación de Parientes y Amigos de Religiosos de Pamplona.
El 24 es suspendido en Valencia el periódico "El Tradicionalista".
El 28 es suspendido en Sevilla el periódico "La Unión".
El diario Madrileño "La Época", comenta lo siguiente: La República nos iba a traer libertades, igualdades, garantías; pero es lo cierto que en el régimen monárquico no sufrió nunca la Prensa de izquierdas una centésima parte de las persecuciones y daños que en régimen de la República esta sufriendo la derecha".
Pero no solamente en las vascongadas se persigue al gremio periodístico. El día 22 en Huesca, el Gobernador Civil, impuso una multa a un periodista por un comentario. La Asociación de Prensa local, en protesta por dicha medida, decide romper sus relaciones con el Gobernador, por creer dicha Asociación, que la multa es injusta. Posteriormente el Sr. Gobernador había entregado a dos periódicos locales, al "Diario de Huesca" y "La Tierra", una nota con la idea de que "por favor" fuese publicada al siguiente día en las primeras páginas de dichos diarios. El hecho es que cuando se entregó a dichos medios la nota, ya habían cerrado su labor de edición y diagramación, siendo publicada la nota en el siguiente número. En vista de ello, el Sr. Gobernador se molestó y impuso multas a dichos diarios por no ser publicada su nota cuando lo pidió. Dichos diarios se quejaron señalando que las multas son injustificadas, ya que se entendía que como no eran decretos o proclamas del Gobierno, existía la libertad de ser o no publicado por dichos diarios.
Asociaciones de Prensa como la de Zaragoza y Vitoria, se solidarizan con sus colegas de Huesca, Bilbao y Pamplona. La Asociación de Prensa de Bilbao se dirigió a la de Madrid, con la idea de que esta elevara su protesta al Presidente de la misma y luego al Presidente de Gobierno y al ministro de la Gobernación. También elevaron a la Oficina de Prensa Internacional de Prensa con sede en Ginebra, un despacho, del cual se puede leer: "Doce periódicos del país Vasco-Navarro, injustamente clausurados por el Gobierno de la República española, acuden a su Oficina Internacional para que curse la protesta más enérgica por el atropello de los elementales principios de libertad de Prensa, universalmente respetados...." Por su parte el Secretario de la Federación de Empresas Periodísticas, envió al ministro de la Gobernación, un escrito en donde señalan su condena al cierre de dichos diarios.
El día 24 es suspendido "El Diario de La Rioja" en Logroño. Ese día son encarcelados los tres directores de los diarios clausurados en Navarra por la publicación de la circular de la Asociación religiosa.
El 25 de agosto, en el Parlamento, se inició un debate sobre la suspensión de periódicos. Gil Robles en su intervención, lee textos de los periódicos suspendidos, tratando de demostrar que dichos diarios no incitan a la rebelión, y que la actitud de dichos periódicos siempre a sido a la defensiva ante la serie de atropellos que ocurren en el país. Para hacer una comparación, Robles lee textos de periódicos de izquierdas de los que se destacan: "...Andalucía debe alzarse en plan de guerra, franca y abiertamente... La dictadura republicana, obstaculizará con todos los medios crueles que están a su alcance esta justa aspiración del pueblo; pero este pueblo, que cada vez despierta más enérgico, más airado, más digno, sabrá arrollar de una vez para siempre el egocentrismo estúpido de esta casta inútil y parasitaria". "Fragmento publicado en Solidaridad Obrera del 1 de julio de 1931..."
Otros textos de periódicos de tilde izquierdista leídos por Robles señalan: "Los republicanos y socialistas fueron cobardes ante la revolución... Desde ahora sabemos que las Cortes Constituyentes están contra el pueblo. Desde ahora no puede haber paz ni minuto de tregua entre las Cortes Constituyentes y la C.N.T.. Solidaridad Obrera del 1 de agosto de 1931..."
Y tras hacer otras lecturas de textos de tilde subversivo publicados en diferentes diarios izquierdistas, Gil Robles pregunta a los asistentes en la Cámara: "Decidme, señores: en la Prensa que ha sido suspendida por el Gobierno ¿hay algún ataque que se parezca si quiera a estos ataques que se dirigen a las Instituciones fundamentales del país?. Pues tened en cuenta que por respecto a la Cámara, no he leído otra porción de documentos, algunos de los cuales tengo aquí, en los que se llega a preconizar el atentado personal, y cuando no se quiere cometer un atentado de tan altos vuelos, se llega a decir, con la condenación expresa de toda persona honrada, que para poner en libertad a algunos detenidos no hay más sistema que liarse a bofetadas con el Director General de Seguridad..."
Tras la intervención de Gil Robles, habló el ministro Maura, quien en su respuesta, no explicó las razones ciertas para la suspensión de los periódicos, y tampoco pudo explicar el porqué no aplica la misma medida a los periódicos de izquierda. Llamó la atención de su intervención de que "En estas propagandas han cuidado sus señorías de fomentar, en cada uno de los actos públicos, la rebelión, diciendo que es hora de tomar el fusil y salir al campo. Cuando habléis de la Guerra Civil, ¿Qué pretendéis? ¿Pretendéis de veras la Guerra Civil?.." Varios diputados vasco-navarros dicen: "¡Pero si nadie entiende eso de Guerra Civil!." Y Maura sigue: "...predicar una Guerra Civil en un Estado moderno es una locura ..." Y responden los diputados vascos-navarros: "¿Quién ha pensado en eso?".
Inexplicablemente Maura empieza a hablar de un complot orquestado por los nacionalistas vascos y los católicos, y para él, la prueba está en el apoyo al Estatuto vasco. Lo cierto es que en esos días se discutía la creación de dicho Estatuto, y de allí, ha que se llegue al extremo de exagerar que los católicos, como se sienten perseguidos, están organizando una guerra civil apoyada por los nacionalistas vascos, es más que una exageración, y una excusa inventada por el gobierno para justificar en cierta forma la persecución de la Prensa.
Al siguiente día, los diputados vascos-navarros expresan su asombro ante tanta fantasía del Sr. Maura, y recalcan que se debería buscar una mejor excusa para justificar la censura y la clausura de medios de comunicación.
El día 2 de septiembre, los radicales socialistas proponen en el Parlamento que no se siga discutiendo el tema de la suspensión de periódicos. En fin, como el Gobierno es mayoría, aplicó la llamada "guillotina parlamentaria" suspendiéndose el debate. En fin, las izquierdas aplicaron su democracia, y el tema de la suspensión de periódicos, se censuro "legalmente" en el Parlamento.
En cuanto a la cuestión religiosa, el día 24 de agosto, en Burgos, un grupo de católicos pensaba realizar un evento tipo congreso, en donde se discutiría la situación anticlerical. Tras empezar el evento, grupos de agitadores que se habían colado, provocaron incidentes violentos, siendo suspendido dicho acto.
Los Sindicatos Libres siguen siendo víctimas del Gobierno. El día 22 de agosto un Juzgado en Barcelona dicto un auto de suspensión de funcionamiento de dichos sindicatos en Cataluña. La excusa: son monárquicos.
Mientras tanto, la C.N.T., con su táctica de "acción directa", declara en Barcelona el día 25 una huelga general de metalúrgicos, lo que dio lugar a numerosas detenciones. Un grupo de presos en esa ciudad, a finales de mes, con el pretexto de que muchos son detenidos gubernativos, declararon la huelga de hambre en la cárcel de Barcelona, pero como esta protesta no dio ningún resultado, se amotinaron, y por algunas horas fueron los dueños del recinto penitenciario, prendiendo fuego a la capilla, a la escuela, a los talleres, arrasando la biblioteca, y no hubo desmán que no cometieran, incluidos disparos. El 2 de septiembre, la Federación local de Sindicatos Únicos, solicitaba la libertad de los presos gubernativos, la liquidación rapidísima de los procesos y la destitución del gobernador accidental. Como no fueron atendidas dichas peticiones, el día 3 estalló la huelga general, que alcanzó hasta los empleados de las funerarias. Hubo muchos tiroteos y agresiones aisladas. Ese día se registro el saldo de un muerto y diecisiete heridos, así como el incendio de la iglesia de San Ramón en el Hospitalet.
El día 4 recrudeció la huelga. Barcelona se despertó con un rumor de guerra. Se intentó por parte de los agitadores, tomar por asalto la jefatura de policía. Al pretender la policía un registro en el Sindicato Único del ramo de la construcción, la fuerza pública fue recibida a tiros. Tras ser rodeada la sede sindicalista, la batalla terminó con un saldo de seis sindicalistas muertos, seis guardias heridos y cuarenta más entre obreros y transeúntes. Los sindicalistas dieron por terminada la huelga, pero recalcando que esto, según publicó "Solidaridad Obrera", sólo era un "estratégico repliegue".
El hecho es que los Sindicatos Libres, no han llegado a usar ese tipo de violencia, y son clausurados. La C.N.T., que hace lo que les da en gana, sigue funcionando.
La anarquista C.N.T., tenía una gran influencia, gracias a su política de violencia tipo ganster. Por su parte los socialistas, tenían la Unión General de Trabajo (U.G.T.). La U.G.T. empezó a florecer gracias a la llegada al ministerio del Trabajo, del socialista Largo Caballero, quien en cierta forma la favoreció desde las alturas del poder. Teniendo el poder, manipularon y hicieron lo que les dio en gana. La libertad sindical y de trabajo no se respeto por parte de la U.G.T. para los trabajadores no asociados a ella. Eliminaron las organizaciones sindicales no afectas a la Casa del Pueblo. Y si en la industria impera los socialistas, se adopta el sistema mayoritario puro: nada de representación de minorías. Más si en agricultura la minoría son ellos, promueven los procedimientos proporcionales.
Para dar un ejemplo de la situación sindical, después del 14 de abril, en el Comité de Transporte los socialistas expulsaron a la representación del Sindicato Libre. Es decir, existe una cruenta persecución de los Sindicatos Libres; eliminaciones en el Consejo de Trabajo de aquellos que no están en la línea U.G.T.; proscripción de la Confederación Católico Agraria de varios organismos oficiales; medidas de gobierno contradictorias para casos idénticos (ferroviarios, tipógrafos, teléfonos), según la etiqueta del personal, etc.
Sabortir y Largo Caballero han impulsado éste tipo de medidas desde el Gobierno en favor del sindicato socialista U.G.T.. El país estaba en manos de la C.N.T. y la U.G.T.. Es quizás por ello que se entiende el porque de tantas huelgas violentas. El hecho es que dicho enfrentamiento entre éstos sindicatos, simplemente consistió en demostrar, quien era más radical y violento a la hora de enfrentar a los denominados sindicatos libres, contribuyendo con ello al caos total en España.
A finales del mes de agosto, el día 31, llama la atención lo ocurrido en Zaragoza, cuando unos empleados de la Telefónica que reparaban un sabotaje y que eran custodiados por elementos de la Guardia Civil para protejerles de posibles agresiones por parte de los saboteadores, son tiroteados, a lo cual los guardias respondieron. El saldo fue de un empleado de telefónica y otro trabajador muertos, así como varios transeúntes heridos que pasaban en ese momento por el lugar. Este hecho bastó para que se dijera en la prensa de izquierda que la Guardia Civil actuó en forma criminal a disparar, y por ello se llamaba a una huelga general en Zaragoza. Es decir, según los sectores de izquierda, la Guardia Civil ante la situación de un tiroteo a ciudadanos que trabajan y que están bajo su protección, tiene que cruzarse de brazos, a riesgo de que ellos también caigan abatidos por las balas de los atacantes. En fin, esta es la típica visión imparcial y objetiva de las izquierdas.
El balance del mes de septiembre es parecido a los anteriores.
Día 1: Huelga general en Zaragoza, con incidentes violentos en donde los huelguistas tirotean a la Guardia Civil -en represalia por lo que ocurrió el día anterior-, interviniendo el Ejército para poner el orden.; Ese día estalla una bomba en la Coruña; Huelga general en Osuna y Cartagena; parciales en Murcia y Tarragona. Se convoca una huelga de camareros en Valencia, en donde grupos de huelguistas se dedican a destrozar locales en donde no era acatada dicha huelga, siendo ésta la típica actitud de terror de la C.N.T..
Día 3: Se registra una huelga de campesinos en Talavera (Toledo).
Día 5: El Director General de Seguridad, ordenó suspender un mitin de afirmación católica en Madrid, porque según su juicio "no quiere autorizar ningún acto extremista", cuando, por ejemplo en Barcelona, si se autorizan actos de izquierdas con saldo de muertos y heridos. Ese día estalla una huelga de mineros en Asturias; colisiones en Rute entre obreros parados y la Guardia Civil; intento comunista en Jaca.
En Tolosa es suspendido el semanario tradicionalista "Tradición Vasca".
Es de resaltar que en las diferentes regiones de España, el Gobierno promovió la utilización de un mecanismo "legal" para poder así suspender periódicos a su gusto. Éste mecanismo "legal" consistió en la llamada "denuncia", en donde una autoridad local, ya sea un Gobernador Civil o Alcalde republicanos, acuden ante un fiscal pidiendo la recogida y confiscación de cualquier periódico, así como la aplicación de multas a dichos medios de comunicación. Un ejemplo fue lo ocurrido el día 5 en Bilbao al periódico "Eizcaltarra", así como también al semanario "La Cruz de San Sebastián", a quienes se les aplicó la llamada "denuncia". Es de resaltar que cuando se ha aplicado éste tipo de medidas violatoria de toda libertad de expresión, adicionalmente suele ser acompañada con la amenaza de cierre o clausura de dicho medio de comunicación.
Como dato curioso, tras los últimos sucesos violentos en Barcelona, el periódico de izquierdas "Solidaridad Obrera", había utilizado un lenguaje en favor y apoyo de dicha violencia, siendo suspendido por un día. Mientras tanto, los periódicos suspendidos de derechas en el Norte de España, llevan semanas cerrados. En éste tipo de situaciones se puede hablar de seriedad y imparcialidad del Gobierno ?.
Día 7: Asalto al Cuartel de la Guardia Civil de Doña Mencia (Córdoba), en donde al frente de los amotinados comunistas, va el alcalde, y tras un tiroteo, hay cinco heridos, dos de ellos guardias.
Día 8: Huelga en el puerto de Gijón, así como en la cuenca minera de León.
Día 10: Suspendido el periódico "El Siglo Futuro" de Madrid, por orden del Gobierno. Ese día es clausurado en Bilbao el diario "Libertad Vasca". La medida se aplica por ser pro-católicos.
Día 11: Colisiones entre nacionalistas y republicanos en Bilbao con saldo de dos muertos.
Día 12: Estalla una bomba en la central telefónica de Sevilla. Ese día se publican datos estadísticos oficiales de las huelgas realizadas durante los meses de abril a junio, y que según el Ministerio de Trabajo la cifra supera las 300.
Día 14: Huelga general en Granada y el 17 en Soria.
Día 16: En Molón (Zaragoza) y Olivares (Sevilla) comunistas tratan de asaltar los cuarteles de la Guardia Civil, con saldo de un muerto y varios heridos.
Día 17: El diario "El Defensor" de las Palmas a sido denunciado por el fiscal, siendo confiscados sus números. El Cuenca, es multado el periódico "El Centro".
Día 18: Huelga general en Sanlúcar de Mayor y en Bujalance. Motines en varios pueblos de Toledo.
Día 19: Huelga de tranvías en Oviedo.
Día 22: Corral de Almaguer y otros pueblos en la provincia de Toledo, están en poder de los comunistas, con saldo de seis muertos y cuarenta heridos. Ese día es suspendido indefinidamente el diario "La Correspondencia Militar" de Madrid.
Día 24: Colisión en los muelles de Santander, con un muerto y seis heridos, en donde los socialistas de la U.G.T. aplicaron la violencia para impedir que trabajadores del Sindicato Católico cumplieran con el deber de trabajar. Huelga general en Santander. Huelga en todas las minas de la cuenca de Teruel. Huelgas en Zamora. Motines en diversos pueblos de Andalucía.
Día 26: Huelga general en Salamanca con saldo de dos muertos y cuatro heridos. Huelga en Manresa, en donde estallan dieciséis bombas. Desordenes comunistas en Sevilla con un muerto y dieciséis heridos.
Día 28: Enfrentamiento a balazos entre elementos del Sindicato Único y comunistas en Sevilla, con saldo de un muerto.
El ambiente del momento queda bien reflejado en un artículo escrito por Don José Ortega y Gasset en el periódico "Luz" del día 9 de septiembre, en donde expresa en uno de sus párrafos: "Una cantidad inmensa de españoles que colaboraron al advenimiento de la República con su acción, con su voto o con lo que es más eficaz que todo eso, con su esperanza, se dicen ahora, entre desasosegados y descontentos: No es esto!, no es esto!".
Uno de los logros de la II República es el voto femenino que se aprueba a finales de 1931. Pero llama la atención las opiniones de algunos destacados dirigentes del régimen: Victoria Kent, dirigente socialista, oponiéndose a dicha idea, decía: "la mujer es retrógrada, reaccionaria e inculta". Indalecio Prieto opinó que con el voto de la mujer "se ha dado una puñalada trapera a la República".
Otro punto de discusión fue la aprobación del famoso artículo 26 de la nueva Constitución, que tras sendas discusiones en el parlamento a mediados de octubre, se aprobó, dándose así, "legalidad" a la persecución religiosa en España. Es de resaltar que los socialistas en la discusión de dicho artículo, proponían la expulsión de todas las ordenes religiosas de España.
Por su parte los grupos pro católicos emprendieron una campaña de revisión constitucional. Es decir, que se modificaran aquellos artículos que perjudican a la comunidad católica. Se realizaron actos, mítines, conferencias, plenos. Todo ello sin violencia por parte de los organizadores.
El balance del mes de octubre es el siguiente:
Día 1: En Zamora, los grupos sindicalistas de izquierda amenazaron al Gobernador con una huelga general si se permitía una tradicional procesión religiosa.
Día 10: En Gilena (Sevilla) son agredidos un grupo de guardias civiles, en donde un cabo es muerto. El saldo del colisión es de cinco muertos.
Día 12: Huelga general en Granada patrocinada por la C.N.T.. Ese mismo día huelga de panaderos en Sevilla, así como paro general en el puerto de Barcelona.
Día 13 y 14: En Granada, los comercios y tiendas que no acataron el llamado a huelga de la C.N.T., fueron atacados con piedras, rompiendo los seguidores de la CNT aparadores, ventanas, así como se produjo el saldo de algún herido a consecuencia de dicha agresión. Gracias al pánico del saqueo, los comercios cierran sus puertas. La Guardia Civil sale a la calle a enfrentar a los agitadores, quienes efectúan disparos a la fuerza pública.
Día 14: Dimisión de Alcalá Zamora, en desacuerdo con la nueva Constitución, ya que él se considera católico, y no estaba dispuesto a participar en algo así. Azaña es el nuevo Presidente.
Día 16: Huelga de ferrocarriles andaluces. Ese día estalla una huelga general en Cádiz, la cual se extiende a San Fernando y Puerto Real.
Día 17: Suspendido por 15 días el periódico "Ejército y Armada" por la publicación de un artículo.
Día 19: La libertad de expresión sigue siendo amenazada. En Barcelona se impuso una multa al diario jaimista "El Correo Catalán" por dar "títulos reales, que no existen en España, a don Jaime de Borbón". La multa es de unas 5.000 Pesetas de la época, en que un diario costaba unos 10 céntimos. En 1999 esas 5.000 Pesetas representan aproximadamente unos cinco millones. Ese mismo día en Valencia, también es multado el semanario jaimista "El Tradicionalista", por dar una noticia sobre la proclamación de Alfonso de Borbón. Es de resaltar que durante esos días se le aplicaron multas a los diarios "El Noticiero Bilbaíno", "Euskadi", "La Tarde", "Nervión" y "El Noticero Granadino". El promedio de las multas suele ser de 500 pesetas de la época (aproximadamente 500.000 en 1999) a cada diario.
Huelga de estudiantes católicos en Bilbao, así como actos de protesta estudiantil en Zaragoza y Sevilla, con motivo de la campaña revisionista de la Constitución. Es de resaltar que se desarrollan diversas actividades de los grupos católicos sin promocionar ningún tipo de violencia.
Día 23: Huelga de tranvías en Sevilla.
Día 31: Huelga de marineros en Asturias.
A todo ello se le suma las agresiones de grupos incendiarios y dinamiteros contra varías iglesias en Madrid, Santander y Bilbao. Estallan bombas en Barcelona, Zaragoza, La Coruña, Sevilla, Córdoba, Granada y otras ciudades. Se declaran en huelga los campesinos de innumerables pueblos andaluces. Bandas armadas se apoderan de Villanueva de Córdoba y asaltan Cortijos, y contra ella se envían fuerzas de infantería y una escuadrilla de aviación. Una colisión de los sublevados con la Guardia Civil en Pozoblanco, ocasiona cinco heridos graves. En las grandes capitales hay epidemias de atracos. Se descubren varios complots comunistas en Málaga, Córdoba, Oviedo y Zaragoza.
Como el régimen naciente no estaba seguro ante la campante violencia callejera, para justificar su existencia, el 20 de octubre, el Sr. Manuel Azaña lee en la Cámara un proyecto de ley de Defensa de la República. Esta nueva Ley, autorizaba al Gobierno a suspender toda publicación molesta para sus intereses partidistas, confiscar las industrias, cerrar los centros y organizaciones políticas y profesionales, y encarcelar y desterrar indefinidamente a quienes le diese la gana. La nueva Ley era, pues, la arbitrariedad coronada, que se prestó a toda clase de injusticias y represalias. Destacan los apartados 3 y 5 y el artículo 11 que conciernen a la difusión de noticias "perjudiciales para la imagen pública".
El apartado 3 señala: Se somete a la difusión de "noticias que puedan quebrantar el crédito o perturbar la paz en el orden público". Un ejemplo de éste tipo de noticias son las huelgas, las cuales, según dicho apartado, no se podían difundir en los medios de comunicación.
El apartado 5 indica: Por él cae bajo la Ley "toda acción o expresión que redunde en menosprecio de las instituciones o órganos del Estado". Con ello quiere decir que una reseña de un medio de comunicación sobre una pelea en las Cortes puede ser causa de que se le aplique a un diario multas de 10 mil pesetas de la época (aproximadamente 10 millones en 1999) o se decrete su suspensión o clausura.
En fin, el criterio ministerial del Gobierno decide y sentencia. Los periódicos quedan entregados por completo al arbitrio del ministro de la Gobernación, Sr. Casares Quiroga.
El artículo 11 señala que se somete a la Ley las "faltas de celo" de los funcionarios públicos y pone su carrera a merced de que el ministro crea o no que esa falta de celo ha existido, sin que el funcionario tenga defensa ni garantía. Un ejemplo es que basta con que se sospeche que cierto funcionario es pro monárquico para su destitución inmediata.
La nueva Ley de Defensa de la República, puso en pie de alerta a los directores de Prensa madrileños, quienes tras una reunión en la Asociación de la Prensa, visitaron al Presidente Azaña, a quien le expresaron sus inquietudes en relación con dicha Ley. Señalaron "que hay en la misma preceptos que se relacionan con la libertad de Prensa y que por lo genérico, resulta imprecisos". Piden a Azaña la publicación de disposiciones reglamentarias de la Ley en lo que a la Prensa afecta, que contengan normas fijas y claras, a la que puedan ajustarse los periódicos. Es de resaltar que la Asociación de Prensa se ofrecía al Gobierno para colaborar en una comisión que se encargara del estudio de dicho reglamento. Por su parte Azaña les reiteró que "la Prensa digna nada tiene que temer", y en todo caso se pusieran en contacto con el ministro de la Gobernación, o que les llamaría. En fin, los miembros de la Asociación se marcharon con la gran duda de que es lo que entiende el Sr. Azaña por "Prensa digna".
Ese mismo día 22, la Asociación de Prensa de Bilbao y el Sindicato Profesional de Periodistas, enviaron un expresivo telegrama a los ministros de la Gobernación, al de Hacienda y al de Estado quien es presidente de la Asociación de Prensa de Madrid. En dicho telegrama, se les suplica que en el próximo Consejo de Ministros se acuerde la reaparición de la "Gaceta del Norte" que lleva dos meses suspendida. Ese mismo día en Bilbao, la Federación Católica de Sindicatos Obreros de Vizcaya que editaba el semanario "El Trabajo" desde 1928, tras ser amonestado y suspendido en tres ocasiones por el Gobernador, decide cerrar definitivamente sus puertas ante la actitud del Gobierno.
El día 23 -gracias a la persistente protestas del sector Prensa- el Consejo de Ministros, acordó levantar la suspensión de los periódicos, con excepción de "La Correspondencia Militar" y "Ejército y Armada".
El día 26, con motivo del aniversario de la promulgación de la Ley que abolió los fueros, el diario "Euzkadi" publicó un trabajo sobre el tema, el cual fue considerado delictivo, siendo recogida su edición. También fue recogido "El Pueblo Vasco", por publicar un artículo que el Gobierno estimó "punible", según los preceptos de la Ley de Defensa de la República. Ese día, adicionalmente, en San Sebastián, el Gobernador multa al semanario "Tradición Vasca", así como a un semanario católico de Reus por haber publicado una esquela de los funerales de don Jaime de Borbón, en donde se le había colocado su antiguo titulo de realeza, siendo esta la excusa para la multa.
El día 26 de octubre el ministro de la Gobernación recibió una comisión de la Asociación de Prensa, quienes ya el día 22 se había reunido con Azaña. El ministro les contestó que la Ley de Defensa de la República "no puede ser objeto de disposiciones complementarias, ni de reglamentos, y que ante la ausencia de Leyes republicanas, el Gobierno necesita plena libertad". En fin, el Sr. ministro les planteó a los amigos de la Prensa la idea de que en las Cortes se podría discutir una Ley de Imprenta, en donde dicha comisión podría participar. Al finalizar la reunión, los miembros de la comisión se fueron con la duda de cuando se empezaría a discutir en las Cortes la hipotética Ley de Imprenta.
El mes de noviembre se podría resumir así:
Día 2: En Bilbao, son atacados a tiros por la espalda dos sacerdotes, falleciendo uno y el otro queda gravemente herido. Con motivo del sepelio del cura asesinado, los comercios en señal de duelo cerraron sus puertas. El Gobernador en represalia les impuso sendas multas a dichos comercios.
Ese mismo día 2 estalla una huelga de taxis en Barcelona, protestando los choferes por la creciente inseguridad en cuanto a que son víctimas frecuentes de atracos.
El día 9 en Valladolid, es clausurado por ordenes del Gobernador, la sede de la Federación de Estudiantes Católicos.
Ese día 9 se realizó un gran mitin católico en Palencia, en donde los asistentes exigían al Gobierno la revisión constitucional de los artículos anticlericales 3, 24, y 25. Las izquierdas, al enterarse de la organización de dicho acto, buscaron los mecanismos para sabotearlo, convocando una huelga general en dicha ciudad. Es de resaltar que a pesar de todas las amenazas, asistieron más de 22 mil personas al acto católico. Tras finalizar el evento, un grupo de asistentes que regresaban en tren a sus casas en Burgos, fueron recibidos en la estación por agitadores de izquierda, quienes empezaron a lanzar piedras, palos, insultos, produciéndose una colisión entre los que salían del tren y los agitadores. Tras intervenir las fuerzas de seguridad, los izquierdistas se dirigieron a las residencias de los jesuitas y maristas, siendo dichos edificios atacados a pedradas, interviniendo de nuevo la Guardia Civil, dándose otra colisión entre la benemérita y los agitadores. El comercio, ante las amenazas de saqueo y destrozos por parte de los agitadores, cerraron sus negocios.
Los miles de católicos que asistieron al acto de Palencia, no entendían como el Gobierno no aplicaba la famosa Ley de Defensa de la República a los socialistas que organizaron la huelga de esa ciudad. El apartado 9 del artículo primero de dicha Ley, coloca bajo la acción de esa Ley "las huelgas no anunciadas con ocho días de anticipación, si no tienen otro plazo marcado en la Ley especial; las declaradas por motivos que no se relacionen con las condiciones de trabajo y las que no se sometan a un procedimiento de arbitraje o conciliación". En la huelga convocada por los socialistas para sabotear el mitin católico, no se presenta los ocho días de anticipación en el anuncio, ni cuestión alguna de trabajo que dirimir, ni nada de acudir a procedimientos conciliatorios o arbitrales. En fin, los socialistas de Palencia deberían haber sido sancionados de acuerdo a dicha Ley. El hecho es que aparentemente la famosa Ley de Defensa de la República ha sido creada sólo para sancionar a católicos, monárquicos, o a todo aquel que se le llame derechista.
Tras conocerse en Madrid el buen resultado del mitin católico en Palencia, los periódicos de izquierdas, "El Socialista", "Heraldo" y "El Liberal", piden en sus publicaciones que el Gobierno -en nombre de la Libertad- impida las convocatorias de campañas católicas revisionistas de la Constitución. El fundamento de dicha petición según dichos diarios, se trata de una campaña monárquica encubierta.
El día 13 de noviembre, el Gobierno -siguiendo las peticiones de la prensa izquierdista- acuerda suspender la campaña revisionista de los católicos. La excusa para ello es la supuesta "campaña antirrepublicana que se viene haciendo con motivo de los mítines" El hecho es que en dichos actos, nadie sale a decir "muera la república". Insisto, en los actos católicos no se utilizó un lenguaje de convocatoria a realizar actos de violencia. Curiosamente, el Gobierno si permite mítines en donde se ataca a los católicos, como el ocurrido en el Alcázar de San Juan, en donde si se utilizó un lenguaje de incitación a la violencia.
El día 16, un guardia civil es muerto por agitadores comunistas en Andujar, a tratar de disolver una manifestación.
Día 18: ocho mil metalúrgicos en huelga en Bilbao.
Día 19: En Banamargos (Málaga), huelga general, destacándose el asalto al Ayuntamiento por parte de los agitadores comunistas.
Día 20: El ministro de la Gobernación, en aplicación de la Ley de Defensa de la República, multa al diario ¨ABC¨ con mil pesetas de la época (aproximadamente un millón en 1999) y tres días de suspensión, por haber publicado . Por otro lado, las izquierdas siguen publicando en sus diarios y pronunciando en sus mítines llamamientos a la revolución por las armas contra el sistema.
Día 24: Estudiantes católicos y independientes de la Universidad Central de Madrid, realizan una asamblea para condenar entre otras cosas, el monopolio que le da el Gobierno a la Federación Universitaria Escolar (F.U.E.), órgano de tilde izquierdista, la cual es una minoría entre los estudiantes. En Valladolid, Sevilla, Valencia y Barcelona, los estudiantes católicos y independientes amenazan con una huelga si no se les reconocen los mismo derechos que tiene la F.U.E. . El Gobierno por su parte respondió que deseaba saber cuales son las bases que defienden los estudiantes católicos y independientes, a lo cual los estudiantes enviaron al Gobierno la siguiente lista: 1º. Autonomía Universitaria; 2º. Libertad de enseñanza con examen de Estado; 3º. Bachillerato clásico, con examen de madurez; 4º. Creación de un patronato nacional de protección a los estudiantes faltos de recursos económicos; 5º. Igualdad de todas las Asociaciones de estudiantes, fundamentalmente profesionales, así como la concesión de representación en los claustros a todos los escolares, aún a los no asociados; 6º. Difusión por toda España de Escuelas elementales de agricultura, de artes y oficios y de otras técnicas, en relación con las principales fuentes de riquezas de cada comarca.
Por su parte el Gobierno les respondió a los estudiantes católicos y independientes, que de acuerdo a dichas bases expuestas por ellos, no se les permite realizar ningún tipo de manifestación. En fin, los estudiantes entienden que el Gobierno les declaró la guerra.
Día 25: Estallan disturbios universitarios en Valladolid, así como una huelga de estudiantes católicos y independientes en Sevilla.
Para dar una idea de como se persigue a la religión, ese día -como nota curiosa-, el Ayuntamiento de la Coruña, publicó un edicto en el que se acuerda cobrar a los capuchinos el servicio prestado por los bomberos municipales cuando unos agitadores quemaron su convento el día 2 de julio. Por su parte el Gobernador de Navarra el día 2 de diciembre, impuso sendas multas a un grupo de cinco alcaldes que habían firmado un documento dirigido a sus colegas de provincia invitándoles a asistir a las fiestas de San Francisco Javier, que tradicionalmente se realizan en Navarra, amenazando adicionalmente el Sr. Gobernador con serias sanciones a aquellos funcionarios que asistan a dichas fiestas.
Las huelgas, la delincuencia y la violencia sigue siendo el pan de cada día a finales de 1931, uniéndose a ello revueltas de presos; tumultos estudiantiles, siendo graves los de Madrid, Zaragoza y Salamanca; colisiones políticas con un nacionalista muerto en Bilbao, y el presidente de la Casa del pueblo en Ávila, también muerto; agresiones a la Guardia Civil con un guardia muerto en Andújar (Granada). En Sevilla, Gijón, Barcelona y Zaragoza, son asesinados algunos obreros por no apoyar las órdenes de los comités de huelgas. En Alar del Rey, es asesinado el secretario del Ayuntamiento.
Día 2 de diciembre: Huelga general en Vitoria.
Día 4: Paro en el puerto de Huelva.
Día 5: Choques de estudiantes católicos y del F.U.E. en la Universidad Central de Madrid.
Día 8: Huelga general en Gijón. El día 9 se producen incidentes violentos con saldo de un muerto y 11 heridos.
Día 9: Huelga general en Zaragoza promovida por la C.N.T.. El día 10 tras intensos tiroteos es asesinado un policía. Un obrero que trabajaba, fue muerto a tiros por pistoleros del la C.N.T. por el simple hecho de no acatar la huelga.
Gabriel Jackson, en su libro sobre la II República comenta en relación a la C.N.T. lo siguiente:
El 10 de diciembre el Parlamento -que fue electo en un proceso totalmente viciado- elige como Presidente de la República al Sr. Alcalá Zamora, y el 11 asume el cargo. "Prometo solemnemente, por mi honor, ante las Cortes Constituyentes y como órgano de soberanía nacional, servir fielmente a la República, guardar y hacer cumplir la Constitución, observar las leyes, consagrar mi actividad de Jefe de Estado al servicio de la justicia y al de España". El hombre que pronuncia esta solemne promesa es el mismo que en el pasado mes de octubre, y ante el mismo salón de sesiones, había asegurado categóricamente que se mantendría fuera de la Constitución por injusta, por sectaria, porque atropellaba derechos sagrados. Es de recordar que en ese mes de octubre Alcalá Zamora había abandonó la presidencia de Gobierno, utilizando dichas apreciaciones como justificativo.
Día 11: En Gijón grupos de huelguistas agreden a la policía, produciéndose enfrentamientos con saldo de un muerto y cuatro heridos. En Oviedo estalla una huelga general en solidaridad con los de Gijón.
En esos días, es detenido en Barcelona el director del diario "El Correo Catalán" Sr. Junyent, quien es directivo de la Asociación de la Prensa.
Día 13: Paro general del taxis en Madrid y Barcelona.
Día 14: En Huesca, tras choques sindicalistas con saldo de tres heridos, se declara una huelga de 48 horas. Ese día se registra un paro general en Gijón, y al día siguiente, en solidaridad, se registra una huelga en León.
El día 15 se forma nuevo Gobierno. Como curiosidad, se designaron para cargos de ministros, personas "amigas" que ni tenían idea de lo que podrían hacer al frente de un Ministerio. Por ejemplo, se nombro como Ministro de Agricultura a Marcelino Domingo. Según un cronista de entonces, el Sr. Domingo es "un profesor de escuela primaria de gran distinción, un dramaturgo social saturado de sentimiento, un ensayista considerable, pero tendría un cierto riesgo afirmar que el nuevo ministro de Agricultura ha visto alguna vez -en su vida- un pollo vivo". Es de resaltar que en esos días se estaba discutiendo la tan deseada reforma agraria. Queda preguntarse si con la asignación de éste nuevo ministro las cosas mejorarían en el campo, sobre todo en Andalucía, donde el desempleo y el hambre, se desarrollaba en gran medida gracias al sabotaje revolucionario.
Día 17: Se registra un intenso tiroteo entre guardias de asalto y obreros del Muelle de Barcelona, con saldo de un muerto y cuatro heridos.
Día 28: Huelga general en Almería convocada por la C.N.T..
Día 29: En el pueblo de Almarcha (Cuenca) elementos socialistas agreden a la Guardia Civil, registrándose un muerto.
Día 30: En el pueblo de Santa María de Magasca (Cáceres) elementos de izquierdas se amotinan, y después de incautarse de las fincas, insultar y apedrear a la Guardia Civil, la fuerza pública responde produciéndose cuatro heridos. Ese día se produce una huelga de campesinos en Daimil (Carmona).
El 31 de diciembre, llamó la atención el asesinato o linchamiento por parte de una multitud izquierdista encabezada por dirigentes socialistas locales, de cuatro guardias civiles, en la calle del Calvario, en el pueblo extremeño de Castilblanco, Badajoz. El "Mundo Obrero" a dar cuenta del suceso, titula la información: "Las masas toman la ofensiva". En fin, la verdad de lo ocurrido consistió en que los guardias trataron de disolver una manifestación, y fueron atacados con cuchillos, hoces y palos, siendo horriblemente mutilados.
Ese día también son asesinados dos guardias civiles en Feria.
En Zaragoza, la C.N.T. convoca una huelga de azucareros.
Para hacer un balance de lo que ha sido la II República desde su proclamación en abril hasta el 31 de diciembre de 1931, voy a dar un ejemplo de lo que ha sido el sector agrícola. Se promulgaron: 157 disposiciones agrarias (cinco leyes, 71 decretos y 81 ordenes); además dos protocolos de tratados internacionales; cuatro proyectos de reforma agraria y cuatro contraproyectos parlamentarios a la misma. Con todo ello, el resultado a sido el total desastre agrícola.
En Tetuán, el día 14, la Guardia Mora rechaza un intento de toma de la Alta Comisaría, con el resultado de cinco muertos y veinticinco heridos. En España hay una epidemia de agresiones, ya que se aprovecha la ocasión para satisfacer alguna venganza. Se empieza a planificar la persecución de todo aquello que se relacione con monarquía, religión, españolismo. Son atacados, saqueados y quemados locales monárquicos. Por ejemplo, las sedes de los Centros Circulo Nacionalista, o las oficinas del Sindicato Libre en diferentes provincias, son asaltados, cuando no clausurados. En Málaga, el día 15, el periódico "La Unión Mercantil" fue asaltado y destrozado, así como el diario católico "Defensor de Canarias" en las Palmas.
El movimiento "proletario" sale a la calle a hacer justicia en sus manos. Se dio el caso en Barcelona el día 15, de que un gerente de fábrica conocido por su lucha frente a las huelgas, es asesinado por miembros del revolucionario Sindicato Único. En esa ciudad dicho Sindicato desata una ola de atentados y asesinatos contra miembros del monárquico Sindicato Libre.
Alcalá Zamora es designado presidente del Gobierno provisional de la República, asumiendo también por obra y gracia de la revolución, y no de un proceso electoral, la Jefatura del Estado. Es de resaltar que los nuevos ministros (todos del comité revolucionario) son los que nombran al presidente, y éste es quien los designa como ministros. Se puede hablar en este tipo de procedimientos de legalidad de un nuevo régimen ?.
Pareciera que el nuevo régimen no encontraría serios obstáculos en su camino. Se publica un decreto de concesión de amnistía total para todos los delitos políticos, sociales y de imprenta. Anticipándose al decreto, en Bilbao unas turbas atacaron la cárcel de Larrinaga y la de mujeres, a los gritos de "¡Viva el Comunismo" y "¡Viva los Soviets!", siendo liberados los presos, quienes en compañía de sus liberadores, tras destruir por completo sus recintos penitenciarios, sobre todo los archivos, deciden seguir su tarea asaltando y destruyendo tiendas. Algo parecido ocurrió en las cárceles de Madrid, Sevilla, Valencia y Barcelona.
En la capital catalana, el aspecto de las calles era el de la proliferación de banderas rojas o con la estrella solitaria separatista, y hasta las soviéticas con hoces y martillos. Se escuchaba el Els Segadors y La Internacional. Mientras tanto, miembros del Sindicato Único, asesinan a tres sindicalistas del Sindicato Libre y hieren a otros cinco, y el día 20 otros dos son asesinados. En el centro de la capital, una multitud apedrea los escaparates de algunas tiendas y asaltan los mercados. En el Ayuntamiento, tras ser nombrado el nuevo alcalde, éste al salir al balcón para pedir orden, el público le contesta pidiéndole "armas y dinero". Ese día la cárcel celular fue atacada por manifestantes que pedían la libertad de los presos políticos, pero como el director no estaba de acuerdo, los manifestantes le prendieron fuego a la puerta y la derribaron con picos y mazos, dejando en libertad a unos 600 presos, casi todos ellos por delitos comunes y ninguno político. En la cárcel de mujeres ocurrió lo mismo, siendo destrozado todos los archivos.
Los separatistas entendían que ésta era la oportunidad para proclamar la República Independiente Catalana. Así que el Sr. Maciá se erigía presidente de la República Catalana. Los radicales, por medio de Emiliano Iglesias, se habían apoderado del Gobierno Civil por pocas horas. Maciá amenazó con enviar dos mil hombres armados con orden de asaltarlo. En fin Maciá se salió con la suya. En Madrid el Gobierno trató de llamarle la atención. Marcelino Domingo y Fernando de los Ríos, en unión de Nicolau D´Olwer, fueron designados para gestionar con Maciá una tregua a sus exigencias separatistas. En fin, el presidente catalán cedió, pero no en dejar su nuevo cargo. Llamó la atención el hecho de mandar a un compositor que le hiciera el Himno de la República Catalana, el cual se estrena en un acto especial el día 18.
Surge en el nuevo Gobierno republicano el problema del separatismo catalán, por lo cual el 26 de abril viaja Alcalá Zamora a Barcelona, con la idea de que los catalanes conozcan al "único" Presidente de la República. El recibimiento fue bueno, con gran cantidad de banderas separatistas. Macía, en compañía de Zamora, en el balcón de la Generalidad, expresaba que el espectáculo daba "un rotundo mentís a los que se empeñaban en hacer circular insidias acerca de hipotéticas desavenencias entre el Gobierno de España y el de Cataluña".
Al problema catalán, se le suma el Vasco. El día 15 de abril en San Sebastián, se reúnen los nacionalistas, quienes firman un pacto con la idea de hacerlo llegar al Gobierno en Madrid. En el se anuncia la proclamación de la República Vasca. Ese día, tras la firma de dicho pacto, en San Sebastián grupos separatistas salen a la calle a celebrar, cantando la Internacional Comunista.
En España, tras la proclamación de la II República, los revolucionarios comunistas, a pesar de haber caído la monarquía, tratan de tomar el poder por las armas. En Sevilla el día 15 hay enfrentamientos con disparos entre comunistas y la Guardia de Asalto. Los revolucionarios marcharon causando destrozos a todo lo que veían en su camino. Por lo menos asaltaron dos armerías, apertrechandose con todo lo que allí encontraron. Trataron de tomar la sede del Circulo Republicano, así como el Cuartel del Regimiento de Infantería de Soria, en donde gritaron mueras al ejército y pidieron más armas para combatir a la Guardia de Seguridad. La guardia del Cuartel disperso a tiros y sablazos a los comunistas, declarando el Gobierno Local estado de guerra.
El 17 en Bilbao, intento de asalto del Cuartel de la Guardia Civil en Gallarta por parte de los comunistas que querían apoderarse del armamento.
Pero no solamente los comunistas son los que plantean divergencias a la nueva República. En Barcelona el día 16 de abril, en la Plaza de toros de las Arenas, la Confederación Anarquista Internacional realizó un mitin, en donde uno de los oradores, Sr. Delabille, atacó al Clero, de quien dijo que con sus bienes se podría dar dinero a los sin trabajo. Arremetió contra Alcalá Zamora, diciendo que los ha engañado, enviando al Gobernador de Sevilla, para que ametralle al pueblo. Señala Delabille que "hay que echar a Alcalá Zamora de la misma manera que al Rey". En dicho acto, un grupo de personas protestó por los términos en que se expresaban los oradores, produciéndose incidentes. En fin, de esta forma se comprueba la vinculación del apoyo anarquista a los amotinamientos comunistas.
En cuanto a la persecución religiosa, el día 15 el Ayuntamiento de Gijón acordó que se expulsara de España a la Compañía de Jesús.
Ya en el ambiente existe un pretexto para quemar las iglesias: Su apoyo a la monarquía. Más adelante tocaré éste tema.
En esos días, en diversos pueblos en donde la monarquía obtuvo mayoría de votos, actuaban las llamadas Juntas Revolucionarias, las cuales no permitían que tomaran los seguidores del Rey, posesión de los ayuntamientos. En cuanto a los concejales monárquicos, estos tenían, antes de tomar el cargo, jurar defensa a la República. El día 24 de abril en Zaragoza, el gobernador civil ha suspendido a 38 ayuntamientos de esa provincia, en los que habían salido electos concejales monárquicos, con la idea de que se organizaran nuevas elecciones. En Ciudad Real, fueron anuladas las elecciones en donde triunfaron los monárquicos. En Callosa de Segura (Alicante) los albistas lograron 12 puestos, y la Unión Monárquica 5, destacándose que durante las elecciones, en los colegios hubo la presencia de notarios que certificaron la legalidad de dicho proceso, y al proclamarse la República, los republicanos socialistas que no habían conseguido ningún puesto, formularon una reclamación ante el nuevo gobernador civil interino, designando a 4 representantes de la conjunción republicano socialista, los cuales se posesionaron del mando en dicho Ayuntamiento, procediendo a dejar cesantes a todos los funcionarios, empleados, etc., y ser sustituidos sin tramite legal, por personal de tendencia socialista. En Vigo, los 19 concejales monárquicos fueron perseguidos y golpeados con palos, los cuales se vieron en la necesidad por amenazas de muerte, de dejar sus cargos. En Priego (Córdoba), la monarquía gana en todos los distritos, siendo electos 16 concejales que son destituidos por socialistas. En Valdetorres (Madrid), 6 concejales monárquicos también son destituidos. En Guernica ocurre lo mismo. En Lugo, en 30 ayuntamientos no salió electo ni un solo republicano socialista, llegando estos al poder gracias a llamadas comisiones gestoras, órgano creado exclusivamente por los socialistas y amparado por la nueva República, con el fin de destituir a todos los funcionarios monárquicos electos legalmente. Las violaciones al sistema electoral se hizo a diestra y siniestra. Para dar una idea global, a comienzos de mayo, el Ministro de Gobernación, señalaba que existían 2.700 expedientes electorales, en donde se pide nulidad y repetición de elecciones.
En fin, en los ayuntamientos en donde hay mayoría monárquica, éstos no se instalan, siendo sustituidos por comisiones gestoras republicano socialistas, que ilegalmente asumen el poder. ¿ Se le podría llamar a esto, el pleno ejercicio de la democracia en la nueva República ?.
Llama poderosamente la atención que de los resultados adulterados en dichas elecciones, en donde salieron electos 5.775 concejales republicanos, frente a los 22.150 monárquicos, los resultados completos no se publicaron jamás, gracias a la posición del nuevo "gobierno legítimo" republicano.
Para el 31 de mayo, el Gobierno repitió elecciones municipales en los lugares suspendidos por la coalición republicano socialista, destacándose que la abstención de elementos monárquicos y de derecha fue la nota de dicho proceso viciado.
Las situaciones de violencia revolucionaria señaladas anteriormente, motivó a más de un monárquico a dejar su empresa, trabajo, casa. Muchos se marcharon al exterior. El Gobierno por su parte solamente indicaba que eran casos de personas acomodadas, y no les daba la importancia. El hecho es que muchos de estos exiliados, no eran aristócratas y políticos de significación monárquica. Lamentablemente, hoy, cuando se habla de refugiados, se refiere solamente a los republicanos de 1939. Pero nadie dice nada de los monárquicos de 1931, y sobre todo, de los católicos entre 1931 a 1939.
El Ministro de Guerra, Sr. Azaña, dicta un decreto, en donde le abre la puerta a todos los jefes y oficiales que deseen abandonar la carrera si les disgusta continuarla bajo el régimen republicano, concediéndoles "el paso a situación de retirado, con el mismo sueldo que disfruten actualmente en su empleo y cualquiera que sean sus años de servicio". Resultado: Más de diez mil jefes y oficiales de todas las Armas y grados se acogieron al decreto y solicitaron el retiro. Con ello el Gobierno eliminó a unos posibles diez mil (algunas fuentes seis mil quinientos) futuros desestabilizadores pro monárquicos, que podrían causar problemas a la hora de alguna intentona militar. También la idea estaba en negar toda participación en el régimen de fuerzas, movimientos o tendencias políticas, o todo aquello que no cuadrase a republicano socialista, creándose un monopolio que ni el general Primo de Rivera, durante la dictadura, tuvo en sus manos.
En el caso de la "reorganización" del mundo militar, esta fue cumpliéndose a lo largo de los meses de mayo, junio y julio, suprimiéndose las Capitanías Generales y el cargo de gobernador militar, quedando reducidas a la mitad el número de divisiones que componían el ejército metropolitano, y ocho divisiones orgánicas fueron base de la nueva estructura militar de la península. Desaparecieron los grados de capitanes y tenientes generales con lo cual la graduación máxima fue la de general de división. Se anularon los ascensos concedidos por elección y por méritos de guerra, quedando en los políticos la tarea de las promociones a los grados superiores, como el de los generales, que dio a entender que para estar un militar en esa promoción, había que meterse en el grupo de amigos, pedir favores, en fin, se politizó la jerarquía militar.
Fue motivo de indignación en la esfera militar, la creación del llamado Gabinete Militar, integrado por un reducido grupo de oficiales, que se caracterizaron por su poca graduación, seleccionados por motivos exclusivamente políticos o de amiguismo, que asesoraban al ministro de guerra, de acuerdo con criterios en ocasiones sectarios o personales.
Llega el 1 de mayo, día del trabajador, para lo cual el Gobierno autoriza las manifestaciones socialistas, comunistas, anarquistas, con la condición de que no se presenten incidentes violentos. En la capital no paso nada, pero en Bilbao, los comunistas tras finalizar un acto, organizan desordenes en los que participa la pasionaria, y en donde los revolucionarios bien armados con armas de fuego, disparan contra las fuerzas de seguridad. La idea abortada de los comunistas era la de enfrentarse a tiros a una manifestación socialista. La violencia comunista causó 25 muertos.
En Barcelona durante el día del trabajador, hubo desordenes con asalto al mercado de la Boquería, así como un fuerte tiroteo frente al Palacio de la Generalidad, en donde grupos de manifestantes tras participar en dos actos comunistas, querían entrar con sus banderas rojas, siendo el resultado: un guardia muerto, que tras tratar de cumplir con su deber, cayó herido en la calle, siendo salvajemente rematado a tiros, palos y patadas por la multitud. Llamó la atención que en los desordenes participó gran cantidad de comunistas franceses. El día anterior un grupo de 100 comunistas asaltaron y destrozaron el mercado San Antonio. Lo interesante de todo esto, es la versión oficial del Gobierno de Macía, que dice que en los desordenes sólo participaron miembros del Sindicato Libre y de la Unión Patriótica, y que sólo hubo un detenido del Sindicato Libre. En la versión del Gobierno si se reconoce que hubo una delegación de comunistas frente a la Generalidad, pero yo no me explico como dos grupos (monárquicos y comunistas) que tienen ciertas divergencias, estén en un mismo lugar armados, sin provocarse una masacre. Con ello se demuestra que la versión del Gobierno en cuanto a la participación del Sindicato Libre y la Unión Patriótica es falsa.
Para dar una idea de las exigencias con motivo del 1 de mayo, en Barcelona en el Palacio de Bellas Artes, se congregaron unos 25 mil anarquistas, pidiendo, entre otras cosas, la incautación de bienes a la Iglesia. En Sevilla grupos izquierdistas pedían el reconocimiento de la U.R.S.S.; armamento del proletariado y desarme de los Cuerpos armados; constitución de los Soviet de obreros, campesinos y soldados, etc., etc.
El 5 de Mayo, Trotsky, en la isla de Prinkipo, redacto los "10 mandamientos del comunista", de los cuales, resaltan los siguientes:
¨I .- Se debe procurar la detención de los personajes monárquicos más significados, la confiscación de los bienes de la Monarquía y de la Grandeza y el armamento del proletariado.
II .- El Gobierno -de la República- es un Gobierno de explotadores. El proletariado deberá mantenerse en oposición irreconciliable.
III .- Los choques violentos de los obreros con los jefes socialista irán en aumento...
VII .- Los comunistas lanzarán las consignas más radicales: voto desde los dieciocho años, creación de milicias, confiscación de bienes, concesión de derechos políticos a los soldados, separación de la iglesia.
VIII .- La consigna central es la del "Soviet" -desde Moscú- , que debe ser popularizada mediante propaganda incansable...¨.
Como se puede apreciar, el comunismo internacional desea tener a España entre sus manos.
LA QUEMA DE CONVENTOS
Pareciera que para muchos, a partir del 10 de mayo, hasta el día 12 que "oficialmente" terminan los actos vandálicos, son los únicos días en que la iglesia durante la II República sufre persecución. Pero esto no es así. Por ejemplo, pocos días antes, el 1 de mayo, en un pueblo de Palencia, el párroco de Villalafuente, el anciano don Sotero de Diego, es cruelmente asesinado. A éste buen hombre, le fracturaron totalmente la base del cráneo, le propinaron 12 heridas de importancia en diferentes partes del cuerpo, le desfiguraron el rostro a fuerza de golpes, le rompieron completamente un brazo, y el ensañamiento fue tal, que le clavaron un palo en el suelo. En cuanto a hechos posteriores al día 12, el 20 en San Sebastián, es incendiado el convento de Benedictos de Lazcano. El día 21, el ayuntamiento de Barcelona acuerda expulsar a los Jesuitas, etc., etc. Es imposible numerar la cantidad de hechos en contra de la iglesia. Hay que recordar, que gracias al triunfo del Frente Popular en 1936, se repite la ola incendiaria, que muchos también desconocen. En relación con éste tipo de hechos, trataré de reflejarlos más adelante.
10 de mayo de 1931. Ese día los monárquicos madrileños inauguran sus nuevas oficinas en la calle Alcalá, contando con anterioridad con una autorización expresa del Gobierno. Tras terminar el acto, surge por toda Madrid el rumor falso, y mal intencionado, de que un grupo de monárquicos asesinaron a un trabajador. Una muchedumbre se reunió frente al edificio de la nueva sede monárquica con la idea de asaltarlo. Las turbas iban por las calles saqueando tiendas, y sobre todo buscando las de armería. Los primeros grupos fueron contra la sede del diario ABC con el propósito de asaltarlo y incendiarlo. La fuerza pública hizo frente, causando dos muertos, que gracias a los falsos rumores difundidos por los agitadores, se llegó a decir que fue una masacre, víctimas de una lluvia de flechas envenenadas que aseguraban habían partido de las ventanas del periódico. Es de resaltar, que el Gobierno, para calmar los ánimos de saqueo a la sede del ABC, colocó un letrero en la entrada que decía: "EL GOBIERNO DE LA REPÚBLICA SE HA INCAUTADO DE ESTE EDIFICIO". El director del diario, Juan Ignacio Luca de Tena, fue encarcelado, y "ABC" sufrió su primera suspensión, que duró hasta el 25 de junio. Mientras tanto, la agitación y los rumores mal infundados siguieron toda la tarde de ese día 10 de mayo.
Los agitadores empiezan a gritar: "¡Mueran los Jesuitas! ¡Hay que quemarles el convento!."
Más tarde, el que era entonces secretario del Comité Central comunista, Enrique Matorras, señaló que ese día en una reunión de los jefes comunistas de Madrid "Además de los dirigentes locales, asistían al conciliábulo dos miembros del Secretariado General y una delegación de la Internacional. Acordándose planear la huelga general, aconsejar el asalto a las armerías y la fraternización de los soldados y obreros. Había que aprovechar cualquier manifestación para lanzar las consignas de los soviets y provocar el alzamiento contra el Gobierno provisional. Se resolvió, además, dar órdenes concretas a las células comunistas con respecto a determinados incendios".
Este programa empieza a realizarse desde las primeras horas de la mañana del día 11 de mayo. La huelga, iniciada la noche anterior, es general. Queda paralizada la circulación; se distribuyen hojas subversivas y los guardias son silbados e injuriados. La Puerta del Sol empieza a llenarse de grupos con puños en alto. Se repetían los gritos: "¡Abajo los conventos!. ¡A la Gran Vía!. ¡Mueran los Jesuitas".
Los grupos fueron a la residencia de los padres de la Compañía que tenían en la calle Flor. Rociaron la puerta principal con gasolina, y empezó a arder el edificio, extendiéndose el fuego a otros lugares. Los guardias, cumpliendo instrucciones del Gobierno, se abstuvieron de actuar, y otro tanto ocurrió a la llegada de los bomberos. Esta actitud alentó más a los exaltados, que decidieron echar más gasolina a la iglesia, y convierten el lugar en un infierno de llamas. Los padres jesuitas tuvieron que escapar por tejados y azoteas ante las amenazas de muerte, con insultos y golpes. Ardieron numerosas obras de arte incalculables, entre ellas una biblioteca de 90.000 volúmenes, en donde se conservaban ediciones únicas.
Siguió el convento cercano de las Vallecas de las religiosas Bernardas, en donde una turba saqueó y incendió el edificio. Ardía a la 1 de la tarde la iglesia de Santa Teresa en la Plaza España. A la 1:30 le tocó el turno al Instituto Católico de Artes y Industrias (I.C.A.I.) en la calle de Alberto Aguilera, en donde se quemó una biblioteca de 20.000 volúmenes. Cinco columnas de humo manchaban el cielo de Madrid.
Los ministros reunidos en la presidencia deliberan sobre los sucesos. A las protestas del ministro de Gobernación de que saliera la Guardia Civil a restablecer el orden, el Sr. Azaña contestó: "Eso no. Todos los conventos de Madrid no valen la vida de un republicano".
A las tres de la tarde, Madrid se ilumina con una nueva hoguera: Arde el colegio de las Maravillas, convirtiéndose en un montón de escombros. Con él se perdió mucho material científico y un magnífico museo de mineralogía. A doscientos metros, se encontraba el convento de las Mercedarias de San Fernando. En esta oportunidad al robo y al incendio se une la profanación, al ser desenterrado el cadáver momificado de una religiosa que falleció en 1864, el cual pasearon en forma de parodia, sacando otras cuatro momias y un cadáver enterrado quince días antes, los cuales arrojaron al fuego. Ante estos excesos de bestialidad, muchos de los espectadores levantaron murmullos de protesta. En el mismo barrio, las iglesias parroquiales de Bellas Vistas y la del Colegio de las Salecianas, ardieron en llamas. Finalmente, ese trágico día lunes, termino con el incendio del colegio de Religiosas del Sagrado Corazón, de Chamartin de la Rosa. Resultado final: Diez centros religiosos hechos cenizas, con centenares de personas que quedaron sin hogar; miles de niños sin escuela, y una desilusión de muchos que creyeron en una República digna y honrada.
El ejemplo de Madrid, alcanzó otras provincias. En Málaga, se alcanzó proporciones de catástrofe. El convento de las religiosas del Servicio Domestico, fue visitado por los "revolucionarios". La residencia de la Compañía de Jesús fue incendiada. Al día siguiente arde al Palacio Episcopal. A las tres de la madrugada ardían los colegios de los agustinos y de los maristas; a las cuatro le toca el turno al periódico "La Unión Mercantil". De allí se extendió la ola incendiaria al convento de Santo Domingo, al Palacio Arzobispal, al centro de los Agustinos, así como el de los Jesuitas, y la sede de los Capuchinos. En la iglesia parroquial de San Pablo, en el barrio de la Trinidad, las criptas fueron violentadas, y la cabeza del antiguo párroco de aquel templo, que había sido apóstol de aquella barriada, era paseada prendida en la punta de un palo por las calles.
La violencia al amanecer se extendió en Málaga a los asilos, hospitales y almacenes. Ardieron el colegio de la Asunción y saquearon el de la Sagrada Familia, el de las Adoratrices, el de San Carlos. Fueron quemados los conventos del Ángel y el de las Mercedarias, así como las iglesias de San José de la Montaña y de la Merced, San Felipe Nerí.... En total, fueron 48 edificios religiosos saqueados o incendiados. El patrimonio histórico, cultural que se perdió es incalculable.
En un libro escrito por el ministro de la Gobernación de entonces, Miguel Maura, y titulado "Así cayó Alfonso XIII", en cuanto a los sucesos de mayo de 1931, comenta lo siguiente:
"Era gobernador de esa provincia cierto amigo de Alcalá Zamora, llamado Antonio Jaén...". "Mandaba la guarnición de Málaga el general Gómez Caminero...". "Parece que, desde la primera hora de la mañana, las gentes del barrio del Perchel se echaron a la calle, arrastrando en la riada a cuantos hallaron a su paso. El gobernador, que acababa de llegar de Madrid en el expreso y que había sido testigo de lo sucedido en la capital, propuso a Gómez Caminero hacer frente al conflicto...".
"Ambos del brazo, salieron al encuentro de las turbas y, tras unos discursos de circunstancias, acordaron que podían los manifestantes quemar simbólicamente no sé que capilla desafectada, situada en las afueras de la ciudad. Allá fueron juntos, autoridades y turba; para dar la representación del espectáculo, prendieron fuego a la capilla, y el pueblo, entusiasmado, aclamó a las autoridades verdaderamente "populares" que, una vez consumado aquel insólito hecho, pretendían que la manifestación se disolviese. Pero no lo entendieron así los manifestantes, sino que, tomaron a los dos peleles jerarquizados en hombros, los condujeron, entre aclamaciones y victores, frente a otras iglesias y conventos, y uno a uno y siempre en presencia de las dos autoridades --el Excmo. Sr. gobernador civil y el Ilmo. Sr. gobernador militar -- ardieron los 22 conventos e iglesias de Málaga..."
En Sevilla, en la anochecer del día 11, tras llegar los rumores de lo ocurrido en Madrid, es quemado el colegio de los Jesuitas. La iglesia del Buen Suceso, de los Carmelitas, es saqueada y quemada. Un monumento nacional, expresión perfecta del barroco sevillano, la capilla de San José, perteneciente a los Capuchinos, es convertida en un montón de ruinas.
En Córdoba, es quemado el convento de San Cayetano.
En Cádiz, arde el convento de los Dominicos, la iglesia de Santa María y el convento del Carmen. Los desordenes se propagaron a otras poblaciones de la provincia. En Sanlúcar de Barrameda ardió el convento de los capuchinos; en Algeciras fueron saqueadas las iglesias. En Jerez de la Frontera fueron asaltados el convento de San Francisco, el de los Carmelitas, los de las mínimas y reparadoras y la residencia de los Jesuitas.
En Valencia, es quemado el convento de los Dominicos. Es saqueado y quemado los colegios de las Teresianas, el de los Padres Capuchinos, y el colegio de las vocaciones. La residencia de los Padres carmelitas fue incendiada. Víctima del saqueo son la residencia de los Padres Salecianos y el convento de las religiosas Salecianas, así como el convento de las Agustinas, y el convento de las Carmelitas que terminó en llamas. También es saqueado el colegio de Santo Tomas y la residencia de los Jesuitas, así como su seminario.
En Murcia es incendiado el diario "La Verdad". Los incendiarios fueron al templo gótico de la Purísima, al que primero destrozaron, y luego prendieron fuego. Saquearon el convento de las Isabelas, el de Las Verónicas ...
En Alicante son incendiadas las Escuelas Salecianas, el convento de San Francisco, el colegio de las carmelitas, la Parroquia de Benalúa, la casa de ejercicios de la Compañía de Jesús, el convento de las Oblatas, la iglesia del Carmen, la residencia de los Jesuitas, los conventos de Capuchinos y Agustinos, el Palacio Episcopal, el colegio de la Compañía de María, el de Jesús y María y el de los hermanos Maristas.
Hubo escenas espeluznantes, a nivel de salvajismo que dominó en Madrid y Málaga, sobre todo con el saqueo de sepulturas religiosas.
Tras terminar la ola incendiaria, en donde se estima que fueron quemados más de un centenar de edificios religiosos, el Gobierno saca la tropa a la calle. En cuanto a los responsables, según el "Heraldo de Madrid", "los frailes de la Flor habían disparado sobre los obreros", dando con ello la justificación de los actos incendiarios. Para "La Voz", todo lo ocurrido no era "más que una maniobra monárquica aprovechada por los elementos enemigos del régimen". Divulgaron varios periódicos la noticia de que un comité monárquico "compuesto por gentes adineradas y por canónigos, se había dedicado a repartir hojas subversivas para excitar al pueblo a destruir los edificios religiosos, complicando su programa con anónimos a los conventos y casas particulares".
El Gobierno, en una nota, confirmaba que los sucesos se habían producido merced a un complot monárquico-comunista para derrocar la República. El fiscal, aseguraba que lo sucedido tenía su origen en París y que el conspirador principal era el propio Rey, secundado por los ex ministros de la Dictadura. En fin, me pregunto quién se puede imaginar que monárquicos y comunistas se pongan de acuerdo para quemar iglesias?.
"El Socialista", órgano oficial del Partido Socialista, afirmaba: "La reacción ha visto ya que el pueblo está dispuesto a no tolerar. Han ardido los conventos: esa es la respuesta de la demagogia popular a la demagogia derechista". Para el Comité ejecutivo del partido republicano radical-socialista, la quema no era más que una protesta realizada contra los manejos de los "residuos de la Monarquía". Y la Federación de Sindicatos Únicos de Barcelona elogiaba "el gesto magnífico del proletariado y el alto ejemplo de vigor y energía revolucionaria".
Como se puede apreciar, hay cierta contradicción en cuanto a quienes son los responsables de los sucesos incendiarios. Se conoce que el Gobierno ordenó a las fuerzas de seguridad que no intervinieran hasta que llegara la calma. Posteriormente el Gobierno busca responsables en los sectores de derecha, quienes son perseguidos y encarcelados.
Para dar una idea en cuanto a la investigación seria por parte de las autoridades, de buscar los responsables de la quema de iglesias, el día 21 de mayo (11 días después de los sucesos), en lo que quedaba del Instituto Católico de Artes y Industria, se presentó un inspector de policía acompañado de varios agentes y guardias cívicos, para realizar en cumplimiento de ordenes superiores, un registro en busca de armas y un paso secreto entre los talleres del instituto y el resto del edificio. Creo que con esto, no hace falta más comentarios.
Un detalle de la visión del Sr. Alcalá Zamora, y sobre todo frente a los medios de comunicación, es que en todos dichos sucesos, sólo hubo 4 muertos en Madrid, y 2 en Córdoba. "Solo 6 muertos!", manifestaba con cierto orgullo. También es de resaltar la censura con el cierre de periódicos, como "Debate", que permaneció más de una semana sin publicar, o el diario ¨ABC¨ que duro casi un mes sin salir a la calle. Al gobierno no le interesaba que diarios de tilde católico informaran sobre las atrocidades cometidas contra la Iglesia, siendo la vía más efectiva el tratar de clausurarlos, sin tener una base legal para ello. Estos diarios tuvieron la suerte de seguir, gracias a las sendas reclamaciones al Gobierno. Pero algunos no tuvieron esa suerte como "El Defensor de Canarias" de Las Palmas, o "La Unión Mercantil" de Málaga, que quedaron hechos añicos gracias al fuego revolucionario.
Como punto final, algunos se preguntaron el porqué los católicos no salieron a la calle a defender sus iglesias con palos y piedras. Es posible que muchos de los incendiarios estaban armados con pistolas, y una pistola puede más que un palo. La tesis que yo creo es que los comunistas provocaron los incendios para ver si los católicos o algunas fuerzas del Gobierno como la Guardia Civil, salían a la calle, para así caerse a tiros y justificar su revuelta revolucionaria. Pero como el Gobierno sabía de antemano esas intenciones, para no perjudicar el nombre de la República como un gobierno represivo, prefirió cruzarse de brazos, y esperar echarle la culpa a la derecha.
Como dato curioso, a mediados de mes, la Confederación Federal de Trabajo convocó una huelga para protestar porque la Guardia Civil no permitió que "el pueblo" quemara la sede del diario ABC. Es de resaltar que los grupos de izquierda, a través de sus diversos medios de comunicación, trataron de desarrollar una campaña difamatoria en el sentido de que en los saqueos y incendios de iglesias, participó de forma llena el pueblo, cuando la realidad fue que quienes actuaron fueron grupítos vandálicos.
El gobierno sigue de lleno con su política anticlerical, y el día 18 de mayo, el obispo de Victoria es invitado a salir de España, con el pretexto de que utilizaba su cargo para hacer política. Lo curioso de esto es que tres días más tarde, el gobierno publica un decreto sobre libertad de conciencia y cultos. Pero a pesar de ello, a la iglesia se le prohibe emitir algún tipo de comentarios. Entonces, para qué es dicho decreto ?. En fin, existía la seculación de los cementerios, separación de la Iglesia y del Estado, prohibición de las autoridades gubernativas y al Ejército de participar en actos religiosos, supresión de honores al Santísimo Sacramento a su paso por las calles, supresión de la obligatoriedad de la enseñanza religiosa en las escuelas primarias y en las superiores, prohibición del crucifijo en las escuelas, intervención del Estado en el tesoro artístico de la Iglesia, etc. La persecución contra la Iglesia se incrementa.
A mediados de junio, con motivo de una pastoral del Cardenal Primado, Dr. Segura, el Gobierno, "estimando peligrosa la permanencia del Cardenal en España", acuerda rogarle que abandone el país. El hecho es que el Cardenal es detenido en Guadalajara por una pareja de la guardia civil, siendo conducido hasta la frontera. "El Socialista" del 18 de junio decía: "El cardenal Segura es una mala persona que no debe vivir en un pueblo que aspira a dignificarse".
Es de resaltar, que frente a la campaña anticlerical de Gobierno, en toda España, grupos católicos, encabezados por Acción Nacional como grupo político, y otras organizaciones, desarrollan diversidad de actividades (recolección de miles de firmas, asambleas públicas, marchas, etc.) para pedir el fin de la persecución religiosa, destacándose que la violencia nunca formó parte de dichos grupos pro católicos. Pero otra era la actitud que asumía el Gobierno frente al reclamo de los grupos pro católicos. En muchos ayuntamientos a dichos grupos se les impuso multas, suspensión de actos, detención arbitraria o persecución de las personas que recogían firmas, o participaban en dichas campañas.
Insisto, no entiendo como hoy hay personas que manifiestan que en la España de la II República existía un estado de derecho.
La epidemia de huelgas y con algunas de ella la violencia "proletaria", invade a España: Estado de guerra en Cádiz el 24 de mayo; el 26 estalla una huelga minera en Soria (Barcelona); Disturbios el día 27 en Pasajes (San Sebastián) con saldo de seis muertos, declarándose el estado de guerra; día 28, huelga general en Asturias; el 29 paro total en Gijón; 1 de junio, huelga minera general en Asturias; el 8 de junio se declara otra en Bilbao; a mediados de ese mes, en Sevilla se declara el estado de guerra gracias a la violencia de los huelguistas; en Pasajes los huelguistas del puerto chocan con la tropa cuando avanzan levanticos sobre San Sebastián, con saldo de seis muertos y cinco heridos; el 13 de junio en Montemoin (Badajoz) es linchado un guardia civil, tras intentar evitar una agresión por parte de un grupo de agitadores a la casa de correos; huelga general el 17 de junio en Gerona, declarándose el estado de sitio; desordenes el 23 de junio en Huelva con seis heridos; el 24 huelga en Córdoba; en Orense concentración de obreros, con asalto al Gobierno Civil; huelga de tranvías el día 26 en Valencia; ese mismo día, huelga de peones albañiles en Granada; el 27 huelga general en Orense; el día 28, choques sangrientos en Barcelona, las Herencias, Alamedilla, Villanueva de las Torres y Vergara, con el resultado de quince muertos y setenta heridos; el 29 paro general en Granada y Málaga con saldo de tres muertos y numerosos heridos; para el 2 de Julio, huelga general y estado de guerra en Logroño, con saldo de un guardia muerto y quince heridos; el día 3, huelgas en Málaga y Melilla...
En Extremadura y Andalucía las cosas eran peores. Gracias al desempleo y el hambre, los agitadores ofrecían a cambio de motines y sublevaciones, el reparto de tierras. Se pusieron de moda los incendios de cosechas, el sacrificio de ganado, así como el asalto a los edificios públicos, o el asesinato de patronos "burgueses" en diversos pueblos de Córdoba y Sevilla. Éste tipo de actividades era impulsada por los "revolucionarios".
En cuanto al funcionamiento del sistema educativo, a comienzos de junio, el Gobierno plantea la salida de profesores, claro, tratando de aplicar un sistema de limpieza antirrepublicana, parecido al que se hizo en el mundo militar, para así manipular el sistema educativo. En la universidad, se decreta que la F.U.E., elemento esencialmente izquierdista en la violencia "estudiantil" en los últimos días de la monarquía, se le de un papel activo en la comunidad universitaria, quedando marginados los demás grupos como la Confederación de Estudiantes Católicos, quienes plantean que, dicha decisión, crea un monopolio de representación manipulada que no cuenta con el apoyo de la mayoría de los estudiantes matriculados. Y esa era una gran realidad.
El 28 de junio se realizan elecciones para designar los diputados que han de componer las cortes constituyentes. Es de resaltar, que en la campaña electoral para dichos comicios, las izquierdas hicieron los que les dio en gana, mientras que todo aquello que pintara a derecha, fue suprimido o censurado por el gobierno. El triunfo de socialistas y republicanos fue aplastante, gracias al reparto de las actas, y gracias también a que los socialistas hacen valer su organización electoral. Para dar una idea de la manipulación, los socialistas sacaron 117 diputados, y a los Monárquicos solo le dejaron 1. Durante la campaña electoral, para dar una idea de lo que fue la persecución de las derechas, se puede destacar lo siguiente:
El 19 de junio en Oviedo, en el teatro Campo amor, el partido Liberal Demócrata, organiza un acto electoral, en el que grupos de revoltosos entraron a la fuerza dando vivas a la República Soviética, siendo los asistentes al mitin apedreados por los agitadores. La Guardia Civil interviene disolviendo el tumulto. Los revoltosos, deciden asaltar la sede del partido Liberal Demócrata, destrozando todo lo que había en dicha sede. Tras éste incidente, muchos grupos de derechas, conservadores y pro-monárquicos, deciden no participar en las elecciones.
El día 22 tenía previsto realizar un mitin en Madrid Acción Nacional. El Ministro de la Gobernación habló con los organizadores de dicho acto, y les señaló que había informaciones de que "algunos perturbadores estaban decididos a interrumpir su celebración". Ya como existían muy serios antecedentes como lo ocurrido en Oviedo, los organizadores suspenden el acto.
Ese mismo día, en Lucena, Córdoba, es suspendido un mitin de Acción Nacional, por el delegado de la autoridad.
El 23 en Ciudad Real, un mitin de derecha liberal, es suspendido, así como otro de la centro derecha liberal en el pueblo de Almoradi, en Alicante. En Sevilla son apedreados propagandistas de Acción Nacional.
En Barcelona, el día 23, un mitin de la Lliga regionalista y los jaimistas es víctima de un grupo de agitadores que agreden a pedradas a los oradores cuando se retiraban, tras ser suspendido el acto por razones de fuertes amenazas por parte de grupos de agitadores izquierdistas. También en Figueras, Rivas y La Bisbal son suspendidos actos de la Lliga, ante los desordenes de grupos izquierdistas. Un grupo de candidatos de la Lliga manifestaron ante diversas instancias, que la izquierda catalana se atribuye la representación del poder público, perturbando las reuniones de tilde derechista, fomentando agresiones.
El día 26 en la Plaza de toros de Daimiel de Ciudad Real, es suspendido un mitin de la Derecha Liberal Republicana.
En Valencia el 27, el Ayuntamiento de Sieca, acordó imponer un impuesto de 25 céntimos por derecho de timbre a los carteles de candidaturas católicas, mientras que a los de izquierda no.
El día 28, durante las elecciones, se producen tumultos, con un saldo de dos muertos. En Vergara (San Sebastián) enfrentamientos que dejan un muerto. En Badalona, un grupo de comunistas tiroteó un camión, muriendo un guardia cívico.
Con éste ambiente, una gran masa de electores se abstuvo de participar en dichas elecciones. Según el Ministro de la Gobernación, Sr. Maura, "No había votado ni el sesenta y cinco por ciento del cuerpo electoral". Si esta es una cifra oficial adulterada, que se puede decir de la cifra real !.
Es de resaltar, que en éste proceso viciado por el Gobierno, fueron electos "formalmente" las nuevas autoridades del Parlamento, que discutiría y aprobaría con amplia mayoría la nueva Constitución republicana, destacándose el famoso artículo 26, que condena a las ordenes religiosas y destaca la confiscación de sus propiedades, así como la prohibición del ejercicio de la industria, el comercio y la enseñanza a los católicos. Es decir, el Gobierno Republicano podía hacer en gana las nuevas leyes con su amplia mayoría. También es de resaltar que ese nuevo Parlamento -por amplia mayoría- elegiría a Alcalá Zamora como Presidente en diciembre.
El 29 de junio, la Academia General Militar de Zaragoza, que fundó y dirigió el General Francisco Franco, se suprime por un decreto. Es decir, de un plumazo, se cierra la mejor academia militar de España. El ministro de guerra francés, quien la visitó un año antes, dijo: "Es, no ya un organismo modelo, sino el Centro, en su género, más moderno del mundo. España puede ufanarse de que la Escuela de Oficiales es la última palabra de la técnica y la pedagogía militar...".
El mes de julio se estrena con un acontecimiento en la Coruña: El día 1 en el barrio de Santa Lucia, un grupo de individuos que participaron en una manifestación sindicalista, agreden a piedra limpia los edificios de los jesuitas y maristas, y posteriormente deciden incendiar el convento de los Capuchinos, ardiendo adicionalmente cinco casas. Dentro de las casas en llamas, estallaron petardos que eran lanzados por los agitadores, y éstos decían que las detonaciones eran municiones que tenían escondidos los frailes dentro del convento. La Guardia Civil trató de hacer frente a los agitadores, pero no pudieron. Entonces el Gobernador decide sacar fuerzas del Ejército para poner el orden, y en la refriega, se producen seis heridos. El día 6 estalla un paro general en la Coruña, en protesta por la represión de la Guardia Civil contra los incendiarios. Es de resaltar, que éste tipo de situaciones, en donde grupos vandálicos de extrema izquierda, tras organizar serios incidentes, y ser detenidos algunos de sus miembros agitadores, una vía utilizada por sus dirigentes para presionar a las autoridades para que sean liberados sus compinches, es la convocatoria de marchas, huelgas generales, o la utilización de la extrema violencia en las calles. Un buen ejemplo de ello, fue lo ocurrido en Ceuta, en donde tras organizarse una huelga de camareros, en algunos cafés y bares que no acataron el llamado de huelga del Sindicato Único, cinco miembros de dicho sindicato, se dedicaron a destrozar dichos comercios. Tras ser detenidos los agitadores por la autoridad local, el sindicato convocó otra huelga pidiendo la libertad de los detenidos.
El 2 de julio en Logroño, se registran numerosos enfrentamientos entre fuerzas de orden público y agitadores. El Gobernador civil trata de mediar y es herido de dos disparos. Un guardia de seguridad es muerto y hay numerosos heridos. Se declara el estado de guerra. Ese mismo día, estalla un paro absoluto en Melilla, en donde los militares salen a la calle para atender los servicios de agua, luz y hospitales.
El 6 de julio se produce la huelga de Telefónica, organizada por la C.N.T., que se llevó a cabo con gran violencia, cometiéndose sabotajes contra la empresa. Cayeron líneas de conducción, se destruyeron máquinas y gran cantidad de instalaciones. El día 22 estalló en pleno centro de Barcelona una bomba en una cámara de redes telefónicas, que dejo incomunicado por muchos días una de las partes más vitales de la ciudad.
A la situación de telefónica se une: el día 6 huelga de albañiles en Sevilla; día 9 huelga general en Utrera; huelga el día 16 de tranvías en Ciudad Lineal; huelga de los metalúrgicos de Bilbao; los marineros y fogoneros de la Unión Naval; los obreros del puerto de El Ferrol, los de la Hidroeléctrica de Valencia; los mineros de Lorca; los choferes de Huelva; los de la construcción en Córdoba, etc.
En la España de esos días, crece el desempleo, y con ello la inseguridad en las calles, los atracos, y los llamados "crímenes sociales". "El Socialista", el 10 de julio, llega a preguntar: "¿Qué va a volver a ocurrir en Barcelona?". En Barcelona todo el mundo está armado. Los sindicalistas se entregan a toda clase de excesos -y entre ellos los mismos socialistas-. ¿A dónde conducirá a Barcelona esta situación?".
En aquellas fechas, el Ministerio de la Gobernación, anunciaba la desarticulación de un plan revolucionario comunista anarquista en Sevilla, en donde participaban miembros con ideario soviético, secundados por algunos aviadores de Madrid y otros del aeródromo de Tablada, en Sevilla, quienes desde esa base elevaron aviones para arrojar sobre la capital andaluza manifiestos de prosa incendiaria y petrolera que empleaban los agitadores, como el notario Blas Infante, que excitaba a los campesinos a que "administraran la justicia por su mano, se apoderasen de las tierras sin más contemplaciones y dieran por establecido el divorcio, en nombre del mejoramiento de la raza". Para el levantamiento, en el aeródromo de Tablada, se había acumulado una gran cantidad de armamento. El intento quedo aplastado, gracias a la participación del Director General de la Guardia Civil, General Sanjurjo.
El 20 de julio, en la capital andaluza, tras intensos tiroteos con saldo de muertos y heridos promocionado por dirigentes "sindicalistas", estos ordenan a sus afiliados que se concentren en la noche del 20 al 21 en Alcalá de Guadaira, para allí iniciar una marcha sobre Sevilla, la cual fue abortada gracias a la intervención de la Guardia Civil. Mientras tanto, en el pueblo de Dos Hermanas, los revoltosos intentaron tomar el cuartel de la Guardia Civil, con el resultado de diecisiete heridos. Algo semejante ocurrió en Coria del Río, Brenes y Utrera, en la misma provincia.
Ese día, el Ministro de la Gobernación, Sr. Maura, atendía en Madrid a un grupo de periodistas, que le preguntaron: "qué solicitaban los huelguistas de Sevilla?", contestando:
- El desarme de la Guardia Civil, la destitución de las autoridades, asalto a los cuarteles, que se degüellen a los hijos de los guardias y la cabeza del ministro de la Gobernación. Ha sido la CNT la que ha declarado la huelga.
El día 21, Sevilla quedo paralizada con la huelga general, declarada con carácter indefinido. Al siguiente día, los revolucionarios desatan su violencia en el centro de la ciudad, tiroteándose con los soldados del regimiento de Soria, que en unión de la Guardia Civil, ocupaba los sitios estratégicos, estendiendose la pelea a los barrios. El día 22 a las 10:30 de la noche se declaró el estado de guerra. La situación de violencia sigue hasta el día 23, cuando la autoridad militar recibe la orden de acabar con dicha situación, aplicando la máxima energía. Pero ni el anuncio de Consejos sumarísimos, ni la supuesta aplicación de la "ley de fugas", pudo frenar a los sediciosos, quienes a las 12:30 de la media noche, se lanzaban en grupos contra el cuartel de la Guardia Civil en la plaza del Sacrificio. Desde las azoteas inmediatas partían tiros contra el cuartel. Fuerzas de la Guardia Civil y del Ejército, acudieron rápidamente en auxilio de los sitiados, aplacando de casa en casa a los revoltosos. Según los datos oficiales, el resultado de la "semana sangrienta sevillana" fue de veinte muertos y más de doscientos heridos.
En un informe secreto elevado al Gobierno por el gobernador civil de Sevilla, Sr. José Bastos, el 2 de julio, y publicado días después en el diario "El Debate", señalaba como las revueltas arruinaban rápidamente a la provincia; las huelgas insensatas que se sucedían constantemente y el predominio del pistolerismo producían el declive económico de la región. En los campos, millares de cabezas de ganado abandonadas padecían de sed y de la falta de cuidado. Las cosechas en plena recolección quedaban desatendidas y a merced de los elementos incendiarios. Las acequias y canalizaciones destruidas, para aniquilar las plantaciones de regadío. Se multiplicaban los incendios y toda clase de atropellos de cosas y personas. Frente a esto, la actuación de unos guardias civiles suponía bien poco. Y terminaba diciendo: "Estamos ya en plena guerra civil. La República, el menos en la provincia de Sevilla, tiene planteada una guerra..." "Esa guerra planteada por el anarcosindicalismo y el comunismo tiende a demoler el edificio económico", a la "aniquilación del espíritu de empresa" y en suma, a la "generalización de la miseria".
A tres meses de la proclamación de la República en 1931, ya un gobernador hablaba sobre una "guerra civil".
En esos días, la censura de prensa se acentúa. El director general de Seguridad ordena la recogida y destrucción de una edición del periódico "La conquista del Estado", veinticuatro horas antes de que saliera al público. Adicionalmente, los anteriores cinco números fueron recogidos por la policía. La excusa del Gobierno, es que dicho diario utiliza un lenguaje subversivo, cuando en las calles circulan diarios de extrema izquierda, como "El Socialista", que se cansan de insultar al Gobierno y promueven y apoyan levantamientos subversivos en sus páginas. En fin, una arbitrariedad más del Gobierno.
Para el 1 de agosto, Moscú había acordado que el proletario del mundo debería celebrar la "jornada roja". En España sólo hubo incidentes graves en Barcelona, donde un grupo de revolucionarios que cantaban la internacional comunista, llevaban una gigantesca bandera soviética, y como siempre, para no perder la costumbre, deciden usar la violencia con el saldo acostumbrado de heridos. Mientras en otros países como Francia o Alemania, fracaso la convocatoria de dicha jornada.
En cuanto a la independencia catalana, el 2 de agosto se realiza un plebiscito para aprobar un famoso estatuto redactado por el Gobierno provisional de Cataluña. Es de resaltar -como cosa curiosa de esos días violentos- que la votación se realizó sin incidentes, pues nadie se le ocurrió salir a discutir la labor de los independentistas. Como en las mesas electorales no hubo intervención de los partidos, las cifras de votación quedaron sin comprobar y nadie se interesó por discutirlas ni por impedir la suplantación o falsificación. Con éste ambiente triunfó arroyadoramente el estatuto, por lo cual el Sr. Maciá, anunciaba que el día 13 marcharía a Madrid para hacer entrega del estatuto.
Y las huelgas siguen: 4 de agosto, huelga de metalúrgicos en Barcelona, en donde se estiman unos 30.000 participantes; día 4, huelga general en Ecija (Andalucía); día 5, huelga general en Aigeciras (Andalucía); en el mismo día un grupo de huelguistas tratan de asaltar el cuartel de la Guardia Civil en Fuensalida (Toledo); mientras que el Barcelona hay unos 70.000 huelguistas del ramo textil; día 8, huelga general en Bilbao; ese día, huelga de panaderos en San Sebastián; día 12, agitación de huelguistas en Zaragoza y disturbios en Córdoba; etc.
También es de resaltar la violencia comunistas de esos días en Alemania, donde son frecuentes los atentados con bombas y las huelgas -situación parecida a la de España-. En Argentina son expulsados por el Gobierno una delegación comercial rusa, acusada de espionaje y asesoramiento económico y ideológico a extremistas en ese país. En China, se presenta una situación parecida. A finales de agosto, disturbios comunistas en Chile con saldo de muertos y heridos. La agitación comunista se extiende en el mundo.
Durante esos días, se trata de realizar un juicio a la monarquía por medio de una llamada Comisión de Responsabilidades del Congreso. Su tarea era la de juzgar por daños morales a la Nación, concertados en las siguientes categorías: a) Alta responsabilidades en Marruecos; b) Política social de Cataluña; c) Golpe de Estado del 13 de septiembre de 1923; d) Gestión y responsabilidades políticas de las dictaduras; e) Proceso de Jaca.
Durante lo que podría llamarse la primera fase del proceso, son detenidos algunos generales y personalidades de la dictadura de Primo de Rivera. El papel de los socialistas en dicho juicio, se podía decir que fue el de una cacería de brujas hacia los sectores de derechas, al tratar de creer que si algún día se tiene que detener y encarcelar a alguien por responsabilidades en la dictadura, esos son los monárquicos y las derechas. Lo curioso de ello es que el partido socialistas formó parte en el gabinete de la dictadura de Primo de Rivera, en donde ellos indirectamente colaboraron, y es de resaltar que jamás se opusieron a la llegada de Primo de Rivera al poder, claro, mientras él no les persiguiera, y de hecho, no les persiguió. Si la idea del juicio de responsabilidades era el de enviar a la cárcel a todos aquellos que colaboraron con la dictadura, gran cantidad de dirigentes republicanos socialistas de ese momento (concejales, alcaldes, ministros, etc.) moralmente eran responsables. En agosto y septiembre en el Congreso se discutía el papel de dicha Comisión, que en más de una oportunidad ordenó la detención de presuntos responsables, como lo ocurrido el 1 de septiembre con cuatro generales que formaron parte del Directorio Militar constituido a raíz del golpe del 13 de septiembre de 1923. A la lista de detenidos se les sumó el Almirante Cornejo, quien desempeñó el papel de ministro en la dictadura, así como otros generales y ex ministros.
La situación de la llamada prensa de derechas es lamentable en cuanto a su persecución. El día 10 de agosto en Bilbao, es incendiado por agitadores de izquierda el periódico "La Gaceta del Norte". El 21 en San Sebastián, los periódicos "El Día" y "Easo" son clausurados por orden del Gobernador Civil. El Director del diario "La Constancia", Sr. Ortega, es encarcelado por la publicación de un artículo. Ese día en Bilbao, son también clausurados "La Gaceta del Norte", así como los periódicos "El fusil", "Esperanza", "Euzcadi", "La Tarde" y el semanario católico "Adelante". La excusa del Gobierno para dichas clausuras: una campaña de sedición.
El hecho es que dichos periódicos, denunciaban la constante campaña anti clerical del Gobierno, aportando hechos y situaciones reales, así como serias criticas a las llamadas comisiones gestoras creadas para quitarle los puestos a los concejales y alcaldes monárquicos legalmente electos. Resaltaban que dichas "comisiones", tras cuatro y más meses después de ser creadas ilegalmente, seguían funcionando en los Ayuntamientos con elementos socialistas puestos a dedo, sin que se convocaran nuevas elecciones en los ayuntamientos afectados. En fin, en ese sólo día son suspendidos trece periódicos.
Por su parte, los periódicos de izquierda, publicaban cosas peores en contra del Gobierno, pidiendo la libertad de los agitadores de Sevilla, anunciando revoluciones armadas del proletario, apoyando la quema de iglesias, los asaltos a los cuarteles de la Guardia Civil, las huelgas injustificadas, etc. Mientras tanto en los periódicos suspendidos de derechas, no existe una campaña parecida llamando a sus lectores a una huelga general, una revuelta armada, o revolución armada. La Prensa afectada exige al Gobierno que presente una prueba que justifique dichos cierres, y en caso de existir, que sean los Tribunales que juzguen y decidan, y si se comprueba alguna responsabilidad o delito, que sean los Tribunales y no el Gobierno en una forma arbitraria quien tome medidas para sancionar supuestos hechos sin pruebas. Pero cómo el Gobierno es socialista, entiende que su único enemigo son los monárquicos y todo aquello que le pinte a derechas, empleando toda clases de coacciones, persecuciones, de las formas más arbitrarias posibles. Es de destacar, que junto a la prensa escrita, la radio también fue víctima de dicha represión.
El día 23, en Pamplona, son recogidas las ediciones y clausurados los periódicos "Diario de Navarra", "Pensamiento Navarro" y "La Tradición Navarra", por publicar un documento de la Asociación de Parientes y Amigos de Religiosos de Pamplona.
El 24 es suspendido en Valencia el periódico "El Tradicionalista".
El 28 es suspendido en Sevilla el periódico "La Unión".
El diario Madrileño "La Época", comenta lo siguiente: La República nos iba a traer libertades, igualdades, garantías; pero es lo cierto que en el régimen monárquico no sufrió nunca la Prensa de izquierdas una centésima parte de las persecuciones y daños que en régimen de la República esta sufriendo la derecha".
Pero no solamente en las vascongadas se persigue al gremio periodístico. El día 22 en Huesca, el Gobernador Civil, impuso una multa a un periodista por un comentario. La Asociación de Prensa local, en protesta por dicha medida, decide romper sus relaciones con el Gobernador, por creer dicha Asociación, que la multa es injusta. Posteriormente el Sr. Gobernador había entregado a dos periódicos locales, al "Diario de Huesca" y "La Tierra", una nota con la idea de que "por favor" fuese publicada al siguiente día en las primeras páginas de dichos diarios. El hecho es que cuando se entregó a dichos medios la nota, ya habían cerrado su labor de edición y diagramación, siendo publicada la nota en el siguiente número. En vista de ello, el Sr. Gobernador se molestó y impuso multas a dichos diarios por no ser publicada su nota cuando lo pidió. Dichos diarios se quejaron señalando que las multas son injustificadas, ya que se entendía que como no eran decretos o proclamas del Gobierno, existía la libertad de ser o no publicado por dichos diarios.
Asociaciones de Prensa como la de Zaragoza y Vitoria, se solidarizan con sus colegas de Huesca, Bilbao y Pamplona. La Asociación de Prensa de Bilbao se dirigió a la de Madrid, con la idea de que esta elevara su protesta al Presidente de la misma y luego al Presidente de Gobierno y al ministro de la Gobernación. También elevaron a la Oficina de Prensa Internacional de Prensa con sede en Ginebra, un despacho, del cual se puede leer: "Doce periódicos del país Vasco-Navarro, injustamente clausurados por el Gobierno de la República española, acuden a su Oficina Internacional para que curse la protesta más enérgica por el atropello de los elementales principios de libertad de Prensa, universalmente respetados...." Por su parte el Secretario de la Federación de Empresas Periodísticas, envió al ministro de la Gobernación, un escrito en donde señalan su condena al cierre de dichos diarios.
El día 24 es suspendido "El Diario de La Rioja" en Logroño. Ese día son encarcelados los tres directores de los diarios clausurados en Navarra por la publicación de la circular de la Asociación religiosa.
El 25 de agosto, en el Parlamento, se inició un debate sobre la suspensión de periódicos. Gil Robles en su intervención, lee textos de los periódicos suspendidos, tratando de demostrar que dichos diarios no incitan a la rebelión, y que la actitud de dichos periódicos siempre a sido a la defensiva ante la serie de atropellos que ocurren en el país. Para hacer una comparación, Robles lee textos de periódicos de izquierdas de los que se destacan: "...Andalucía debe alzarse en plan de guerra, franca y abiertamente... La dictadura republicana, obstaculizará con todos los medios crueles que están a su alcance esta justa aspiración del pueblo; pero este pueblo, que cada vez despierta más enérgico, más airado, más digno, sabrá arrollar de una vez para siempre el egocentrismo estúpido de esta casta inútil y parasitaria". "Fragmento publicado en Solidaridad Obrera del 1 de julio de 1931..."
Otros textos de periódicos de tilde izquierdista leídos por Robles señalan: "Los republicanos y socialistas fueron cobardes ante la revolución... Desde ahora sabemos que las Cortes Constituyentes están contra el pueblo. Desde ahora no puede haber paz ni minuto de tregua entre las Cortes Constituyentes y la C.N.T.. Solidaridad Obrera del 1 de agosto de 1931..."
Y tras hacer otras lecturas de textos de tilde subversivo publicados en diferentes diarios izquierdistas, Gil Robles pregunta a los asistentes en la Cámara: "Decidme, señores: en la Prensa que ha sido suspendida por el Gobierno ¿hay algún ataque que se parezca si quiera a estos ataques que se dirigen a las Instituciones fundamentales del país?. Pues tened en cuenta que por respecto a la Cámara, no he leído otra porción de documentos, algunos de los cuales tengo aquí, en los que se llega a preconizar el atentado personal, y cuando no se quiere cometer un atentado de tan altos vuelos, se llega a decir, con la condenación expresa de toda persona honrada, que para poner en libertad a algunos detenidos no hay más sistema que liarse a bofetadas con el Director General de Seguridad..."
Tras la intervención de Gil Robles, habló el ministro Maura, quien en su respuesta, no explicó las razones ciertas para la suspensión de los periódicos, y tampoco pudo explicar el porqué no aplica la misma medida a los periódicos de izquierda. Llamó la atención de su intervención de que "En estas propagandas han cuidado sus señorías de fomentar, en cada uno de los actos públicos, la rebelión, diciendo que es hora de tomar el fusil y salir al campo. Cuando habléis de la Guerra Civil, ¿Qué pretendéis? ¿Pretendéis de veras la Guerra Civil?.." Varios diputados vasco-navarros dicen: "¡Pero si nadie entiende eso de Guerra Civil!." Y Maura sigue: "...predicar una Guerra Civil en un Estado moderno es una locura ..." Y responden los diputados vascos-navarros: "¿Quién ha pensado en eso?".
Inexplicablemente Maura empieza a hablar de un complot orquestado por los nacionalistas vascos y los católicos, y para él, la prueba está en el apoyo al Estatuto vasco. Lo cierto es que en esos días se discutía la creación de dicho Estatuto, y de allí, ha que se llegue al extremo de exagerar que los católicos, como se sienten perseguidos, están organizando una guerra civil apoyada por los nacionalistas vascos, es más que una exageración, y una excusa inventada por el gobierno para justificar en cierta forma la persecución de la Prensa.
Al siguiente día, los diputados vascos-navarros expresan su asombro ante tanta fantasía del Sr. Maura, y recalcan que se debería buscar una mejor excusa para justificar la censura y la clausura de medios de comunicación.
El día 2 de septiembre, los radicales socialistas proponen en el Parlamento que no se siga discutiendo el tema de la suspensión de periódicos. En fin, como el Gobierno es mayoría, aplicó la llamada "guillotina parlamentaria" suspendiéndose el debate. En fin, las izquierdas aplicaron su democracia, y el tema de la suspensión de periódicos, se censuro "legalmente" en el Parlamento.
En cuanto a la cuestión religiosa, el día 24 de agosto, en Burgos, un grupo de católicos pensaba realizar un evento tipo congreso, en donde se discutiría la situación anticlerical. Tras empezar el evento, grupos de agitadores que se habían colado, provocaron incidentes violentos, siendo suspendido dicho acto.
Los Sindicatos Libres siguen siendo víctimas del Gobierno. El día 22 de agosto un Juzgado en Barcelona dicto un auto de suspensión de funcionamiento de dichos sindicatos en Cataluña. La excusa: son monárquicos.
Mientras tanto, la C.N.T., con su táctica de "acción directa", declara en Barcelona el día 25 una huelga general de metalúrgicos, lo que dio lugar a numerosas detenciones. Un grupo de presos en esa ciudad, a finales de mes, con el pretexto de que muchos son detenidos gubernativos, declararon la huelga de hambre en la cárcel de Barcelona, pero como esta protesta no dio ningún resultado, se amotinaron, y por algunas horas fueron los dueños del recinto penitenciario, prendiendo fuego a la capilla, a la escuela, a los talleres, arrasando la biblioteca, y no hubo desmán que no cometieran, incluidos disparos. El 2 de septiembre, la Federación local de Sindicatos Únicos, solicitaba la libertad de los presos gubernativos, la liquidación rapidísima de los procesos y la destitución del gobernador accidental. Como no fueron atendidas dichas peticiones, el día 3 estalló la huelga general, que alcanzó hasta los empleados de las funerarias. Hubo muchos tiroteos y agresiones aisladas. Ese día se registro el saldo de un muerto y diecisiete heridos, así como el incendio de la iglesia de San Ramón en el Hospitalet.
El día 4 recrudeció la huelga. Barcelona se despertó con un rumor de guerra. Se intentó por parte de los agitadores, tomar por asalto la jefatura de policía. Al pretender la policía un registro en el Sindicato Único del ramo de la construcción, la fuerza pública fue recibida a tiros. Tras ser rodeada la sede sindicalista, la batalla terminó con un saldo de seis sindicalistas muertos, seis guardias heridos y cuarenta más entre obreros y transeúntes. Los sindicalistas dieron por terminada la huelga, pero recalcando que esto, según publicó "Solidaridad Obrera", sólo era un "estratégico repliegue".
El hecho es que los Sindicatos Libres, no han llegado a usar ese tipo de violencia, y son clausurados. La C.N.T., que hace lo que les da en gana, sigue funcionando.
La anarquista C.N.T., tenía una gran influencia, gracias a su política de violencia tipo ganster. Por su parte los socialistas, tenían la Unión General de Trabajo (U.G.T.). La U.G.T. empezó a florecer gracias a la llegada al ministerio del Trabajo, del socialista Largo Caballero, quien en cierta forma la favoreció desde las alturas del poder. Teniendo el poder, manipularon y hicieron lo que les dio en gana. La libertad sindical y de trabajo no se respeto por parte de la U.G.T. para los trabajadores no asociados a ella. Eliminaron las organizaciones sindicales no afectas a la Casa del Pueblo. Y si en la industria impera los socialistas, se adopta el sistema mayoritario puro: nada de representación de minorías. Más si en agricultura la minoría son ellos, promueven los procedimientos proporcionales.
Para dar un ejemplo de la situación sindical, después del 14 de abril, en el Comité de Transporte los socialistas expulsaron a la representación del Sindicato Libre. Es decir, existe una cruenta persecución de los Sindicatos Libres; eliminaciones en el Consejo de Trabajo de aquellos que no están en la línea U.G.T.; proscripción de la Confederación Católico Agraria de varios organismos oficiales; medidas de gobierno contradictorias para casos idénticos (ferroviarios, tipógrafos, teléfonos), según la etiqueta del personal, etc.
Sabortir y Largo Caballero han impulsado éste tipo de medidas desde el Gobierno en favor del sindicato socialista U.G.T.. El país estaba en manos de la C.N.T. y la U.G.T.. Es quizás por ello que se entiende el porque de tantas huelgas violentas. El hecho es que dicho enfrentamiento entre éstos sindicatos, simplemente consistió en demostrar, quien era más radical y violento a la hora de enfrentar a los denominados sindicatos libres, contribuyendo con ello al caos total en España.
A finales del mes de agosto, el día 31, llama la atención lo ocurrido en Zaragoza, cuando unos empleados de la Telefónica que reparaban un sabotaje y que eran custodiados por elementos de la Guardia Civil para protejerles de posibles agresiones por parte de los saboteadores, son tiroteados, a lo cual los guardias respondieron. El saldo fue de un empleado de telefónica y otro trabajador muertos, así como varios transeúntes heridos que pasaban en ese momento por el lugar. Este hecho bastó para que se dijera en la prensa de izquierda que la Guardia Civil actuó en forma criminal a disparar, y por ello se llamaba a una huelga general en Zaragoza. Es decir, según los sectores de izquierda, la Guardia Civil ante la situación de un tiroteo a ciudadanos que trabajan y que están bajo su protección, tiene que cruzarse de brazos, a riesgo de que ellos también caigan abatidos por las balas de los atacantes. En fin, esta es la típica visión imparcial y objetiva de las izquierdas.
El balance del mes de septiembre es parecido a los anteriores.
Día 1: Huelga general en Zaragoza, con incidentes violentos en donde los huelguistas tirotean a la Guardia Civil -en represalia por lo que ocurrió el día anterior-, interviniendo el Ejército para poner el orden.; Ese día estalla una bomba en la Coruña; Huelga general en Osuna y Cartagena; parciales en Murcia y Tarragona. Se convoca una huelga de camareros en Valencia, en donde grupos de huelguistas se dedican a destrozar locales en donde no era acatada dicha huelga, siendo ésta la típica actitud de terror de la C.N.T..
Día 3: Se registra una huelga de campesinos en Talavera (Toledo).
Día 5: El Director General de Seguridad, ordenó suspender un mitin de afirmación católica en Madrid, porque según su juicio "no quiere autorizar ningún acto extremista", cuando, por ejemplo en Barcelona, si se autorizan actos de izquierdas con saldo de muertos y heridos. Ese día estalla una huelga de mineros en Asturias; colisiones en Rute entre obreros parados y la Guardia Civil; intento comunista en Jaca.
En Tolosa es suspendido el semanario tradicionalista "Tradición Vasca".
Es de resaltar que en las diferentes regiones de España, el Gobierno promovió la utilización de un mecanismo "legal" para poder así suspender periódicos a su gusto. Éste mecanismo "legal" consistió en la llamada "denuncia", en donde una autoridad local, ya sea un Gobernador Civil o Alcalde republicanos, acuden ante un fiscal pidiendo la recogida y confiscación de cualquier periódico, así como la aplicación de multas a dichos medios de comunicación. Un ejemplo fue lo ocurrido el día 5 en Bilbao al periódico "Eizcaltarra", así como también al semanario "La Cruz de San Sebastián", a quienes se les aplicó la llamada "denuncia". Es de resaltar que cuando se ha aplicado éste tipo de medidas violatoria de toda libertad de expresión, adicionalmente suele ser acompañada con la amenaza de cierre o clausura de dicho medio de comunicación.
Como dato curioso, tras los últimos sucesos violentos en Barcelona, el periódico de izquierdas "Solidaridad Obrera", había utilizado un lenguaje en favor y apoyo de dicha violencia, siendo suspendido por un día. Mientras tanto, los periódicos suspendidos de derechas en el Norte de España, llevan semanas cerrados. En éste tipo de situaciones se puede hablar de seriedad y imparcialidad del Gobierno ?.
Día 7: Asalto al Cuartel de la Guardia Civil de Doña Mencia (Córdoba), en donde al frente de los amotinados comunistas, va el alcalde, y tras un tiroteo, hay cinco heridos, dos de ellos guardias.
Día 8: Huelga en el puerto de Gijón, así como en la cuenca minera de León.
Día 10: Suspendido el periódico "El Siglo Futuro" de Madrid, por orden del Gobierno. Ese día es clausurado en Bilbao el diario "Libertad Vasca". La medida se aplica por ser pro-católicos.
Día 11: Colisiones entre nacionalistas y republicanos en Bilbao con saldo de dos muertos.
Día 12: Estalla una bomba en la central telefónica de Sevilla. Ese día se publican datos estadísticos oficiales de las huelgas realizadas durante los meses de abril a junio, y que según el Ministerio de Trabajo la cifra supera las 300.
Día 14: Huelga general en Granada y el 17 en Soria.
Día 16: En Molón (Zaragoza) y Olivares (Sevilla) comunistas tratan de asaltar los cuarteles de la Guardia Civil, con saldo de un muerto y varios heridos.
Día 17: El diario "El Defensor" de las Palmas a sido denunciado por el fiscal, siendo confiscados sus números. El Cuenca, es multado el periódico "El Centro".
Día 18: Huelga general en Sanlúcar de Mayor y en Bujalance. Motines en varios pueblos de Toledo.
Día 19: Huelga de tranvías en Oviedo.
Día 22: Corral de Almaguer y otros pueblos en la provincia de Toledo, están en poder de los comunistas, con saldo de seis muertos y cuarenta heridos. Ese día es suspendido indefinidamente el diario "La Correspondencia Militar" de Madrid.
Día 24: Colisión en los muelles de Santander, con un muerto y seis heridos, en donde los socialistas de la U.G.T. aplicaron la violencia para impedir que trabajadores del Sindicato Católico cumplieran con el deber de trabajar. Huelga general en Santander. Huelga en todas las minas de la cuenca de Teruel. Huelgas en Zamora. Motines en diversos pueblos de Andalucía.
Día 26: Huelga general en Salamanca con saldo de dos muertos y cuatro heridos. Huelga en Manresa, en donde estallan dieciséis bombas. Desordenes comunistas en Sevilla con un muerto y dieciséis heridos.
Día 28: Enfrentamiento a balazos entre elementos del Sindicato Único y comunistas en Sevilla, con saldo de un muerto.
El ambiente del momento queda bien reflejado en un artículo escrito por Don José Ortega y Gasset en el periódico "Luz" del día 9 de septiembre, en donde expresa en uno de sus párrafos: "Una cantidad inmensa de españoles que colaboraron al advenimiento de la República con su acción, con su voto o con lo que es más eficaz que todo eso, con su esperanza, se dicen ahora, entre desasosegados y descontentos: No es esto!, no es esto!".
Uno de los logros de la II República es el voto femenino que se aprueba a finales de 1931. Pero llama la atención las opiniones de algunos destacados dirigentes del régimen: Victoria Kent, dirigente socialista, oponiéndose a dicha idea, decía: "la mujer es retrógrada, reaccionaria e inculta". Indalecio Prieto opinó que con el voto de la mujer "se ha dado una puñalada trapera a la República".
Otro punto de discusión fue la aprobación del famoso artículo 26 de la nueva Constitución, que tras sendas discusiones en el parlamento a mediados de octubre, se aprobó, dándose así, "legalidad" a la persecución religiosa en España. Es de resaltar que los socialistas en la discusión de dicho artículo, proponían la expulsión de todas las ordenes religiosas de España.
Por su parte los grupos pro católicos emprendieron una campaña de revisión constitucional. Es decir, que se modificaran aquellos artículos que perjudican a la comunidad católica. Se realizaron actos, mítines, conferencias, plenos. Todo ello sin violencia por parte de los organizadores.
El balance del mes de octubre es el siguiente:
Día 1: En Zamora, los grupos sindicalistas de izquierda amenazaron al Gobernador con una huelga general si se permitía una tradicional procesión religiosa.
Día 10: En Gilena (Sevilla) son agredidos un grupo de guardias civiles, en donde un cabo es muerto. El saldo del colisión es de cinco muertos.
Día 12: Huelga general en Granada patrocinada por la C.N.T.. Ese mismo día huelga de panaderos en Sevilla, así como paro general en el puerto de Barcelona.
Día 13 y 14: En Granada, los comercios y tiendas que no acataron el llamado a huelga de la C.N.T., fueron atacados con piedras, rompiendo los seguidores de la CNT aparadores, ventanas, así como se produjo el saldo de algún herido a consecuencia de dicha agresión. Gracias al pánico del saqueo, los comercios cierran sus puertas. La Guardia Civil sale a la calle a enfrentar a los agitadores, quienes efectúan disparos a la fuerza pública.
Día 14: Dimisión de Alcalá Zamora, en desacuerdo con la nueva Constitución, ya que él se considera católico, y no estaba dispuesto a participar en algo así. Azaña es el nuevo Presidente.
Día 16: Huelga de ferrocarriles andaluces. Ese día estalla una huelga general en Cádiz, la cual se extiende a San Fernando y Puerto Real.
Día 17: Suspendido por 15 días el periódico "Ejército y Armada" por la publicación de un artículo.
Día 19: La libertad de expresión sigue siendo amenazada. En Barcelona se impuso una multa al diario jaimista "El Correo Catalán" por dar "títulos reales, que no existen en España, a don Jaime de Borbón". La multa es de unas 5.000 Pesetas de la época, en que un diario costaba unos 10 céntimos. En 1999 esas 5.000 Pesetas representan aproximadamente unos cinco millones. Ese mismo día en Valencia, también es multado el semanario jaimista "El Tradicionalista", por dar una noticia sobre la proclamación de Alfonso de Borbón. Es de resaltar que durante esos días se le aplicaron multas a los diarios "El Noticiero Bilbaíno", "Euskadi", "La Tarde", "Nervión" y "El Noticero Granadino". El promedio de las multas suele ser de 500 pesetas de la época (aproximadamente 500.000 en 1999) a cada diario.
Huelga de estudiantes católicos en Bilbao, así como actos de protesta estudiantil en Zaragoza y Sevilla, con motivo de la campaña revisionista de la Constitución. Es de resaltar que se desarrollan diversas actividades de los grupos católicos sin promocionar ningún tipo de violencia.
Día 23: Huelga de tranvías en Sevilla.
Día 31: Huelga de marineros en Asturias.
A todo ello se le suma las agresiones de grupos incendiarios y dinamiteros contra varías iglesias en Madrid, Santander y Bilbao. Estallan bombas en Barcelona, Zaragoza, La Coruña, Sevilla, Córdoba, Granada y otras ciudades. Se declaran en huelga los campesinos de innumerables pueblos andaluces. Bandas armadas se apoderan de Villanueva de Córdoba y asaltan Cortijos, y contra ella se envían fuerzas de infantería y una escuadrilla de aviación. Una colisión de los sublevados con la Guardia Civil en Pozoblanco, ocasiona cinco heridos graves. En las grandes capitales hay epidemias de atracos. Se descubren varios complots comunistas en Málaga, Córdoba, Oviedo y Zaragoza.
Como el régimen naciente no estaba seguro ante la campante violencia callejera, para justificar su existencia, el 20 de octubre, el Sr. Manuel Azaña lee en la Cámara un proyecto de ley de Defensa de la República. Esta nueva Ley, autorizaba al Gobierno a suspender toda publicación molesta para sus intereses partidistas, confiscar las industrias, cerrar los centros y organizaciones políticas y profesionales, y encarcelar y desterrar indefinidamente a quienes le diese la gana. La nueva Ley era, pues, la arbitrariedad coronada, que se prestó a toda clase de injusticias y represalias. Destacan los apartados 3 y 5 y el artículo 11 que conciernen a la difusión de noticias "perjudiciales para la imagen pública".
El apartado 3 señala: Se somete a la difusión de "noticias que puedan quebrantar el crédito o perturbar la paz en el orden público". Un ejemplo de éste tipo de noticias son las huelgas, las cuales, según dicho apartado, no se podían difundir en los medios de comunicación.
El apartado 5 indica: Por él cae bajo la Ley "toda acción o expresión que redunde en menosprecio de las instituciones o órganos del Estado". Con ello quiere decir que una reseña de un medio de comunicación sobre una pelea en las Cortes puede ser causa de que se le aplique a un diario multas de 10 mil pesetas de la época (aproximadamente 10 millones en 1999) o se decrete su suspensión o clausura.
En fin, el criterio ministerial del Gobierno decide y sentencia. Los periódicos quedan entregados por completo al arbitrio del ministro de la Gobernación, Sr. Casares Quiroga.
El artículo 11 señala que se somete a la Ley las "faltas de celo" de los funcionarios públicos y pone su carrera a merced de que el ministro crea o no que esa falta de celo ha existido, sin que el funcionario tenga defensa ni garantía. Un ejemplo es que basta con que se sospeche que cierto funcionario es pro monárquico para su destitución inmediata.
La nueva Ley de Defensa de la República, puso en pie de alerta a los directores de Prensa madrileños, quienes tras una reunión en la Asociación de la Prensa, visitaron al Presidente Azaña, a quien le expresaron sus inquietudes en relación con dicha Ley. Señalaron "que hay en la misma preceptos que se relacionan con la libertad de Prensa y que por lo genérico, resulta imprecisos". Piden a Azaña la publicación de disposiciones reglamentarias de la Ley en lo que a la Prensa afecta, que contengan normas fijas y claras, a la que puedan ajustarse los periódicos. Es de resaltar que la Asociación de Prensa se ofrecía al Gobierno para colaborar en una comisión que se encargara del estudio de dicho reglamento. Por su parte Azaña les reiteró que "la Prensa digna nada tiene que temer", y en todo caso se pusieran en contacto con el ministro de la Gobernación, o que les llamaría. En fin, los miembros de la Asociación se marcharon con la gran duda de que es lo que entiende el Sr. Azaña por "Prensa digna".
Ese mismo día 22, la Asociación de Prensa de Bilbao y el Sindicato Profesional de Periodistas, enviaron un expresivo telegrama a los ministros de la Gobernación, al de Hacienda y al de Estado quien es presidente de la Asociación de Prensa de Madrid. En dicho telegrama, se les suplica que en el próximo Consejo de Ministros se acuerde la reaparición de la "Gaceta del Norte" que lleva dos meses suspendida. Ese mismo día en Bilbao, la Federación Católica de Sindicatos Obreros de Vizcaya que editaba el semanario "El Trabajo" desde 1928, tras ser amonestado y suspendido en tres ocasiones por el Gobernador, decide cerrar definitivamente sus puertas ante la actitud del Gobierno.
El día 23 -gracias a la persistente protestas del sector Prensa- el Consejo de Ministros, acordó levantar la suspensión de los periódicos, con excepción de "La Correspondencia Militar" y "Ejército y Armada".
El día 26, con motivo del aniversario de la promulgación de la Ley que abolió los fueros, el diario "Euzkadi" publicó un trabajo sobre el tema, el cual fue considerado delictivo, siendo recogida su edición. También fue recogido "El Pueblo Vasco", por publicar un artículo que el Gobierno estimó "punible", según los preceptos de la Ley de Defensa de la República. Ese día, adicionalmente, en San Sebastián, el Gobernador multa al semanario "Tradición Vasca", así como a un semanario católico de Reus por haber publicado una esquela de los funerales de don Jaime de Borbón, en donde se le había colocado su antiguo titulo de realeza, siendo esta la excusa para la multa.
El día 26 de octubre el ministro de la Gobernación recibió una comisión de la Asociación de Prensa, quienes ya el día 22 se había reunido con Azaña. El ministro les contestó que la Ley de Defensa de la República "no puede ser objeto de disposiciones complementarias, ni de reglamentos, y que ante la ausencia de Leyes republicanas, el Gobierno necesita plena libertad". En fin, el Sr. ministro les planteó a los amigos de la Prensa la idea de que en las Cortes se podría discutir una Ley de Imprenta, en donde dicha comisión podría participar. Al finalizar la reunión, los miembros de la comisión se fueron con la duda de cuando se empezaría a discutir en las Cortes la hipotética Ley de Imprenta.
El mes de noviembre se podría resumir así:
Día 2: En Bilbao, son atacados a tiros por la espalda dos sacerdotes, falleciendo uno y el otro queda gravemente herido. Con motivo del sepelio del cura asesinado, los comercios en señal de duelo cerraron sus puertas. El Gobernador en represalia les impuso sendas multas a dichos comercios.
Ese mismo día 2 estalla una huelga de taxis en Barcelona, protestando los choferes por la creciente inseguridad en cuanto a que son víctimas frecuentes de atracos.
El día 9 en Valladolid, es clausurado por ordenes del Gobernador, la sede de la Federación de Estudiantes Católicos.
Ese día 9 se realizó un gran mitin católico en Palencia, en donde los asistentes exigían al Gobierno la revisión constitucional de los artículos anticlericales 3, 24, y 25. Las izquierdas, al enterarse de la organización de dicho acto, buscaron los mecanismos para sabotearlo, convocando una huelga general en dicha ciudad. Es de resaltar que a pesar de todas las amenazas, asistieron más de 22 mil personas al acto católico. Tras finalizar el evento, un grupo de asistentes que regresaban en tren a sus casas en Burgos, fueron recibidos en la estación por agitadores de izquierda, quienes empezaron a lanzar piedras, palos, insultos, produciéndose una colisión entre los que salían del tren y los agitadores. Tras intervenir las fuerzas de seguridad, los izquierdistas se dirigieron a las residencias de los jesuitas y maristas, siendo dichos edificios atacados a pedradas, interviniendo de nuevo la Guardia Civil, dándose otra colisión entre la benemérita y los agitadores. El comercio, ante las amenazas de saqueo y destrozos por parte de los agitadores, cerraron sus negocios.
Los miles de católicos que asistieron al acto de Palencia, no entendían como el Gobierno no aplicaba la famosa Ley de Defensa de la República a los socialistas que organizaron la huelga de esa ciudad. El apartado 9 del artículo primero de dicha Ley, coloca bajo la acción de esa Ley "las huelgas no anunciadas con ocho días de anticipación, si no tienen otro plazo marcado en la Ley especial; las declaradas por motivos que no se relacionen con las condiciones de trabajo y las que no se sometan a un procedimiento de arbitraje o conciliación". En la huelga convocada por los socialistas para sabotear el mitin católico, no se presenta los ocho días de anticipación en el anuncio, ni cuestión alguna de trabajo que dirimir, ni nada de acudir a procedimientos conciliatorios o arbitrales. En fin, los socialistas de Palencia deberían haber sido sancionados de acuerdo a dicha Ley. El hecho es que aparentemente la famosa Ley de Defensa de la República ha sido creada sólo para sancionar a católicos, monárquicos, o a todo aquel que se le llame derechista.
Tras conocerse en Madrid el buen resultado del mitin católico en Palencia, los periódicos de izquierdas, "El Socialista", "Heraldo" y "El Liberal", piden en sus publicaciones que el Gobierno -en nombre de la Libertad- impida las convocatorias de campañas católicas revisionistas de la Constitución. El fundamento de dicha petición según dichos diarios, se trata de una campaña monárquica encubierta.
El día 13 de noviembre, el Gobierno -siguiendo las peticiones de la prensa izquierdista- acuerda suspender la campaña revisionista de los católicos. La excusa para ello es la supuesta "campaña antirrepublicana que se viene haciendo con motivo de los mítines" El hecho es que en dichos actos, nadie sale a decir "muera la república". Insisto, en los actos católicos no se utilizó un lenguaje de convocatoria a realizar actos de violencia. Curiosamente, el Gobierno si permite mítines en donde se ataca a los católicos, como el ocurrido en el Alcázar de San Juan, en donde si se utilizó un lenguaje de incitación a la violencia.
El día 16, un guardia civil es muerto por agitadores comunistas en Andujar, a tratar de disolver una manifestación.
Día 18: ocho mil metalúrgicos en huelga en Bilbao.
Día 19: En Banamargos (Málaga), huelga general, destacándose el asalto al Ayuntamiento por parte de los agitadores comunistas.
Día 20: El ministro de la Gobernación, en aplicación de la Ley de Defensa de la República, multa al diario ¨ABC¨ con mil pesetas de la época (aproximadamente un millón en 1999) y tres días de suspensión, por haber publicado . Por otro lado, las izquierdas siguen publicando en sus diarios y pronunciando en sus mítines llamamientos a la revolución por las armas contra el sistema.
Día 24: Estudiantes católicos y independientes de la Universidad Central de Madrid, realizan una asamblea para condenar entre otras cosas, el monopolio que le da el Gobierno a la Federación Universitaria Escolar (F.U.E.), órgano de tilde izquierdista, la cual es una minoría entre los estudiantes. En Valladolid, Sevilla, Valencia y Barcelona, los estudiantes católicos y independientes amenazan con una huelga si no se les reconocen los mismo derechos que tiene la F.U.E. . El Gobierno por su parte respondió que deseaba saber cuales son las bases que defienden los estudiantes católicos y independientes, a lo cual los estudiantes enviaron al Gobierno la siguiente lista: 1º. Autonomía Universitaria; 2º. Libertad de enseñanza con examen de Estado; 3º. Bachillerato clásico, con examen de madurez; 4º. Creación de un patronato nacional de protección a los estudiantes faltos de recursos económicos; 5º. Igualdad de todas las Asociaciones de estudiantes, fundamentalmente profesionales, así como la concesión de representación en los claustros a todos los escolares, aún a los no asociados; 6º. Difusión por toda España de Escuelas elementales de agricultura, de artes y oficios y de otras técnicas, en relación con las principales fuentes de riquezas de cada comarca.
Por su parte el Gobierno les respondió a los estudiantes católicos y independientes, que de acuerdo a dichas bases expuestas por ellos, no se les permite realizar ningún tipo de manifestación. En fin, los estudiantes entienden que el Gobierno les declaró la guerra.
Día 25: Estallan disturbios universitarios en Valladolid, así como una huelga de estudiantes católicos y independientes en Sevilla.
Para dar una idea de como se persigue a la religión, ese día -como nota curiosa-, el Ayuntamiento de la Coruña, publicó un edicto en el que se acuerda cobrar a los capuchinos el servicio prestado por los bomberos municipales cuando unos agitadores quemaron su convento el día 2 de julio. Por su parte el Gobernador de Navarra el día 2 de diciembre, impuso sendas multas a un grupo de cinco alcaldes que habían firmado un documento dirigido a sus colegas de provincia invitándoles a asistir a las fiestas de San Francisco Javier, que tradicionalmente se realizan en Navarra, amenazando adicionalmente el Sr. Gobernador con serias sanciones a aquellos funcionarios que asistan a dichas fiestas.
Las huelgas, la delincuencia y la violencia sigue siendo el pan de cada día a finales de 1931, uniéndose a ello revueltas de presos; tumultos estudiantiles, siendo graves los de Madrid, Zaragoza y Salamanca; colisiones políticas con un nacionalista muerto en Bilbao, y el presidente de la Casa del pueblo en Ávila, también muerto; agresiones a la Guardia Civil con un guardia muerto en Andújar (Granada). En Sevilla, Gijón, Barcelona y Zaragoza, son asesinados algunos obreros por no apoyar las órdenes de los comités de huelgas. En Alar del Rey, es asesinado el secretario del Ayuntamiento.
Día 2 de diciembre: Huelga general en Vitoria.
Día 4: Paro en el puerto de Huelva.
Día 5: Choques de estudiantes católicos y del F.U.E. en la Universidad Central de Madrid.
Día 8: Huelga general en Gijón. El día 9 se producen incidentes violentos con saldo de un muerto y 11 heridos.
Día 9: Huelga general en Zaragoza promovida por la C.N.T.. El día 10 tras intensos tiroteos es asesinado un policía. Un obrero que trabajaba, fue muerto a tiros por pistoleros del la C.N.T. por el simple hecho de no acatar la huelga.
Gabriel Jackson, en su libro sobre la II República comenta en relación a la C.N.T. lo siguiente:
El 10 de diciembre el Parlamento -que fue electo en un proceso totalmente viciado- elige como Presidente de la República al Sr. Alcalá Zamora, y el 11 asume el cargo. "Prometo solemnemente, por mi honor, ante las Cortes Constituyentes y como órgano de soberanía nacional, servir fielmente a la República, guardar y hacer cumplir la Constitución, observar las leyes, consagrar mi actividad de Jefe de Estado al servicio de la justicia y al de España". El hombre que pronuncia esta solemne promesa es el mismo que en el pasado mes de octubre, y ante el mismo salón de sesiones, había asegurado categóricamente que se mantendría fuera de la Constitución por injusta, por sectaria, porque atropellaba derechos sagrados. Es de recordar que en ese mes de octubre Alcalá Zamora había abandonó la presidencia de Gobierno, utilizando dichas apreciaciones como justificativo.
Día 11: En Gijón grupos de huelguistas agreden a la policía, produciéndose enfrentamientos con saldo de un muerto y cuatro heridos. En Oviedo estalla una huelga general en solidaridad con los de Gijón.
En esos días, es detenido en Barcelona el director del diario "El Correo Catalán" Sr. Junyent, quien es directivo de la Asociación de la Prensa.
Día 13: Paro general del taxis en Madrid y Barcelona.
Día 14: En Huesca, tras choques sindicalistas con saldo de tres heridos, se declara una huelga de 48 horas. Ese día se registra un paro general en Gijón, y al día siguiente, en solidaridad, se registra una huelga en León.
El día 15 se forma nuevo Gobierno. Como curiosidad, se designaron para cargos de ministros, personas "amigas" que ni tenían idea de lo que podrían hacer al frente de un Ministerio. Por ejemplo, se nombro como Ministro de Agricultura a Marcelino Domingo. Según un cronista de entonces, el Sr. Domingo es "un profesor de escuela primaria de gran distinción, un dramaturgo social saturado de sentimiento, un ensayista considerable, pero tendría un cierto riesgo afirmar que el nuevo ministro de Agricultura ha visto alguna vez -en su vida- un pollo vivo". Es de resaltar que en esos días se estaba discutiendo la tan deseada reforma agraria. Queda preguntarse si con la asignación de éste nuevo ministro las cosas mejorarían en el campo, sobre todo en Andalucía, donde el desempleo y el hambre, se desarrollaba en gran medida gracias al sabotaje revolucionario.
Día 17: Se registra un intenso tiroteo entre guardias de asalto y obreros del Muelle de Barcelona, con saldo de un muerto y cuatro heridos.
Día 28: Huelga general en Almería convocada por la C.N.T..
Día 29: En el pueblo de Almarcha (Cuenca) elementos socialistas agreden a la Guardia Civil, registrándose un muerto.
Día 30: En el pueblo de Santa María de Magasca (Cáceres) elementos de izquierdas se amotinan, y después de incautarse de las fincas, insultar y apedrear a la Guardia Civil, la fuerza pública responde produciéndose cuatro heridos. Ese día se produce una huelga de campesinos en Daimil (Carmona).
El 31 de diciembre, llamó la atención el asesinato o linchamiento por parte de una multitud izquierdista encabezada por dirigentes socialistas locales, de cuatro guardias civiles, en la calle del Calvario, en el pueblo extremeño de Castilblanco, Badajoz. El "Mundo Obrero" a dar cuenta del suceso, titula la información: "Las masas toman la ofensiva". En fin, la verdad de lo ocurrido consistió en que los guardias trataron de disolver una manifestación, y fueron atacados con cuchillos, hoces y palos, siendo horriblemente mutilados.
Ese día también son asesinados dos guardias civiles en Feria.
En Zaragoza, la C.N.T. convoca una huelga de azucareros.
Para hacer un balance de lo que ha sido la II República desde su proclamación en abril hasta el 31 de diciembre de 1931, voy a dar un ejemplo de lo que ha sido el sector agrícola. Se promulgaron: 157 disposiciones agrarias (cinco leyes, 71 decretos y 81 ordenes); además dos protocolos de tratados internacionales; cuatro proyectos de reforma agraria y cuatro contraproyectos parlamentarios a la misma. Con todo ello, el resultado a sido el total desastre agrícola.
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